Esta es la típica historia de la cenicienta moderna, adaptada a las nuevas tecnologías. Se trata del caso de una joven vendedora ambulante de pan que se atravesó, sin estar consciente de ello, en la sesión de fotos de la estrella del pop británico Tinie Tempah y con ello llamó la atención la fotógrafa que ahora le ah ayudado a ser modelo… con ayuda de las redes sociales.
Jumoke Orisaguna, caminaba con la mercancía sobre su cabeza, cuando arruinó sin saberlo, las imágenes que tomaban y es que después de ser estilista en el estado de Osun, (suroeste de Nigeria) debió dejar a sus dos hijos y esposo, para trasladarse a la capital, donde había más oportunidades de empleo y gracias a lo cual debía trabajar vendiendo pan para ganar un dólar al día después de trabajar de 2:30 p.m. a 11:00 p.m.
Cuando Orisaguna interrumpió a la conocida fotógrafa de Nigeria, Ty Bello, mientras tomaba las imágenes de la reciente campaña del cantante Tinie Tempah, ésta al percatarse de su imagen le preguntó si podía tomarle una instantánea, a lo cual accedió.
Y aunque la artista no consideraba que fuesen las mejores imágenes posibles, al subirlas a las redes sociales, la sensación fue muy positiva, hasta el punto de que los usuarios pensaban que se trababa de una modelo.
Una profesión con la que, gracias a esta reacción de las redes sociales, ya ejerce, pues acaba de firmar un contrato con la agencia de modelaje Few Models y está destacando en diversas campañas publicitarias.
Orisaguna por su parte asegura que está sorprendida pues nunca esperó que pudiese pasarle a ella, y reconoce que muchas personas se han identificado con ella, porque la situación que se vive en Nigeria es muy complicada y todos buscan una historia con final feliz.
La hasta hace poco vendedora ambulante de pan y madre de dos hijos de cinco y un año, ha obtenido también gracias a este encuentro fortuito, una beca ofrecida por un banco, para que sus hijos tengan educación hasta su edad universitaria. Todo por estar en el sitio y momento indicados… con el toque de la varita mágica de las redes sociales.
Fuente: Ty Bello
