Manchester, New Hampshire, USA
Una vez más se comprueba la frase que mi padre tanto me dijera cuando empezaba a comprender sus consejos… “Hijo, más vale amigos que dinero”. Hoy, con mi experiencia, podría transformar la frase en: “En promoción, más vale contenido que dinero”. En cualquier medio, político, comercial o social, “contenido mata dinero”. Y lo que más escasea en este mundo comercial y político es… “contenido”.
Las atrocidades que el aspirante a candidato republicano vocifera, nada tienen que ver con este artículo, el objetivo, más bien, es hacernos ver la estrategia que el magnate neoyorquino a seguido a fin de ganar las elecciones primarias de su partido.
Muchos hemos quedado pasmados de su falsa perorata inundada de conceptología inflamatoria y racista. Sin embargo, en ella hay contenido, absolutamente orientado a seguidores hambrientos de slogans a seguir, de causas a abrazar, de enemigos a matar. Al igual que “Bernie Sanders” y su tesis socialista, las personas queremos escuchar postulados sin paja y/o propuesta arriesgada.
Existe una relación inversamente proporcional entre contenido y dinero y esto se evidencia en la tabla. Es importante recordar que, en promoción, contenido camina solo y, a veces (como en este caso) sin las largas piernas del poder económico.
Veamos unos números para entender este concepto basados en las contribuciones aisladas “fuera del los partidos”, de algunos grupos. Son números raquíticos, meramente simbólicos que nos permiten apreciar esta relación inversa:
Mientras el ex-gobernador de Florida y hermano de George W. “Jeb Bush” iba en el sótano de aceptación electoral antes de NH, llevaba la delantera en gasto. Hoy podríamos suponer que, bajo esta tesis, sus mensajes deben de estar plagados de contenido inútil, o sea: nada nuevo y/o importante encontrándose en 4to lugar a pesar de las brutales cantidades de financiamiento. Lo mismo “Chris Christie” y el cubano “Marco Rubio” los cuales, aunque gozan de recursos superiores a otros, no parecen levantar polvo en sus territorios electorales. ¿Será posible que haya pobreza de conceptos atractivos?. “Ted Cruz”, en picada del primer puesto en la pasada elección, hoy lo vemos en 3er lugar. El Sr. Cruz parece mantenerse a flote dadas sus -también- inflamatorias y bélicas diatribas conservadoras.
Mal contenido si, pero… contenido al fin. Contenido siempre mata dinero, las ideas no han pasado de moda. Para los dos demócratas restantes en la contienda, “Bernie Sanders”, con menos recursos y escasa presencia nacional, parece haber captado la imaginación de los Millennials en New Hampshire con recursos menores a los Republicanos debido supongo, a un contenido atractivo postulando (curiosamente) un país ideal localizado bucólicamente en Los Balcanes europeos que en las Rocallosas americanas. Hillary necesita analizar contenidos y no meramente spots publicitarios. Por cierto, la palabra “trump”, si buscas en el diccionario de Cambridge significa: “A card that belongs to the group of cards that has been chosen to have the highest value in a particular game”. Curioso ¿no?