El domingo más de 53 millones de personas vieron el juego entre los Broncos de Denver y los Patriots de New England. Observaron la derrota del equipo de Tom Brady y también un error en el funcionamiento de las tablets Surface durante el partido. Microsoft, que pagó 400 millones de dólares por ser patrocinador oficial de la NFL, por fin tiene su versión sobre lo que ha pasado en la liga de futbol americano.
De acuerdo con un reporte de Deadline, el juego entre Broncos y Patriots fue la final de la Conferencia Americana con mayor audiencia en 39 años. Fue visto por 53 millones 300 mil personas sólo en Estados Unidos, a eso se le deben sumar las transmisiones en Latinoamérica y algunos países de Europa.
Durante la primera mitad del encuentro, llamó la atención que las Surface del equipo de Nueva Inglaterra dejaron de funcionar. Microsoft pagó hace tres años alrededor de 400 millones de dólares por ser patrocinador oficial y por que los jugadores, coachs y comentaristas usen las tablets de la compañía.
Este martes, Yusuf Mehdi, vicepresidente corporativo de Windows y dispositivos en Microsoft, escribió un post en el blog oficial en el que aborda del tema.
Mehdi señala que lo que pasó durante el juego del domingo, cuando las Surface no mostraban imágenes fue culpa de la red del estadio y no de los equipos electrónicos de Microsoft, algo que confirmó la NFL. El ejecutivo asegura que las tablets no han fallado en los dos años que se han usado en los juegos de futbol americano profesional.
Yusuf Mehdi fue más allá e hizo mención de las imágenes en las que jugadores de la NFL como Aaron Rodgers, de los Packers, y Johnny Manziel, de los Browns, han aparecido en televisión golpeando con furia las Surface, al señalar que esto es muestra de que los jugadores obtienen información más rápido, aunque no les guste lo que ven, y que “los dispositivos están hechos para resistir lo que sea, incluso la cabeza de Manziel”.
Microsoft tendrá aún más exposición durante el Super Bowl 50 que se jugará el 7 de febrero entre los Broncos de Denver y los Panthers de Carolina.
