El aumento en el uso de ad blockers es un tema que preocupa a los anunciantes, agencias y medios digitales. Algunos han intentado prohibir el acceso a quienes los usan pero no ha funcionado como quisieran. ¿Son en vano los intentos de forzar a la gente a que vea los anuncios?
Los ad blockers son programas o extensiones para navegadores que evitan que se muestren anuncios publicitarios en la computadora o los dispositivos móviles.
Se calcula que en México el 10 por ciento de los usuarios de internet usa ad blockers mientras que en Estados Unidos es el 15 por ciento. El país que más los utiliza es Grecia, donde cerca del 37 por ciento de los usuarios decidió instalar algo para no ver anuncios, según datos de Statista.
Tal vez el porcentaje de ad blockers instalados no es tan grande, pero sí pesa en la industria. De acuerdo con datos de Pagefair y Adobe, el año pasado los ad blockers representaron un costo económico de 21 mil 800 millones de dólares para la industria publicitaria y se estima que en 2016 la cifra podría llegar a los 41 mil millones.
Tan solo en Estados Unidos se invirtieron 15 mil millones de dólares en publicidad digital durante los meses de agosto a octubre del año pasado, 23 por ciento más que el mismo periodo pero de 2014. La inversión en anuncios es importante para los medios digitales (publishers) que sobreviven gracias a ese dinero. Por eso no es raro que busquen desincentivar el uso de ad blocker, aunque no siempre sale bien.
Hace un par de semanas Forbes comenzó a no permitir el acceso a su contenido a los usuarios con ad blockers, pero el experimento no salió bien porque, según decenas de reportes en Twitter, cuando alguien desactivaba la extensión para poder entrar el sitio enviaba malware . Luego de las quejas, Forbes dejó de prohibir el acceso a quienes tienesn ad blockers y publicó un post con “lo que aprendieron de esta experiencia”.
En el Reino Unido varios medios han tratado de hacer lo mismo, algunos casos son The Inquirer y City Am, que solicitan a los visitantes que quiten los bloqueadores de anuncios. También la industria de la pornografía lucha contra los ad blockers, sitios como Pornhub solicitan que se desactiven.
El asunto de los ad blockers es un problema que preocupa a la industria y no sólo se trata sólo de que las personas no quieren ver pop-ups, sino que no confían en la publicidad digital. De acuerdo con un reporte de Nielsen, el 46 por ciento de los usuarios confía en los anuncios que ve en sitios web, social media y buscadores. Lo que significa que más de la mitad no lo hace.
El que mucha gente no quiera ver o no confía en los anuncios en internet ha hecho que algunas marcas y publishers estén adoptando otras estrategias publicitarias, como el branded content, patrocinios y product placement en contenido de calidad el cual muchas veces es creado por los mismos usuarios. Por lo pronto parece que para agencias digitales, publishers y marcas es el camino a seguir.