Navidad es una época en la que los sentimientos están a flor de piel, por lo que podemos llegar a olvidar que las empresas y los clientes también cuentan con ellos. En consecuencia, ésta temporada representa una gran oportunidad para otorgar un detalle a aquel que durante el año fue tu cliente y contrató tus servicios.
Te diremos cuatro formas de hacer sentir a tu cliente especial en Navidad, esto a través de ciertos detalles que reconocen la importancia que tiene el consumidor dentro de una firma comercial.
1. Una carta con logros
De una forma muy sencilla puedes extender una carta donde menciones aquellos logros significativos que se tuvieron durante el año en la empresa y agradecer por la confianza que el cliente les ha depositado.
Esto no solo será un buen detalle durante esta temporada, ya que también reafirmará los buenos momentos y resultados que el consumidor obtuvo contigo apoyando la idea de que tú eres el proveedor indicado.
2. Avisar que tomarás algunos días de descanso
Algunas empresas cierran ciertos días su oficina, ya que en varias industrias la demanda baja considerablemente. No importa si te tomas uno o varios días de descanso durante estas fechas, lo importante es que informes a tus clientes que las oficinas estarán cerradas ciertos días y que si existe cualquier emergencia pueden comunicarse a un correo electrónico o teléfono destinado para asuntos urgentes.
Si tus consumidores están acostumbrados a que cuentan contigo cuando te necesitan, informarles que vas a cerrar, y las fechas se reprogramaran en dado caso de que requieran algún servicio en específico.
3. Regalar el disco que a nadie le gusta
Es clásico que muchas empresas –por quedar bien con los clientes– ordeean al departamento de compras que inviertan en algunas botellas de vino, chocolates, dulces típicos de la época y canastas llenas de regalos.
En estos casos, es preferible invertir más a investigar lo qué realmente le gusta a tu cliente y sorprenderlo con cosas que, en la mayoría de las ocasiones, cuestan menos de lo que pensamos.
Poner atención durante el año en los gustos del cliente y/o investigar con sus colaboradores cercanos, puede ayudarnos a obsequiar algo que les llegue al corazón y sientan que estás atento a sus necesidades reales y no solo a las superficiales. Ejemplo de esto son cosas como un disco que a nadie le gusta pero tu cliente mataría por el, un dulce vintage de sabor raro o una corbata que podría ser de tu abuelito.
4. Consentir al influeciador
Las secretarias, ayudantes o socios que no son los que toman la última palabra pero que son parte importante de la empresa y sobre todo que son influenciadores para tu cliente, son tan importantes como el cliente mismo.
Obsequiar algo sencillo pero de muy buen gusto puede ayudar a estrechar la relación con aquella persona que, si bien, no es el que tomó la decisión de contratarte, si fue quien influyó para que lo hicieran.
ENTONCES…
Muchas veces nos desvivimos por regalarle a nuestros clientes esa botella cara o artefacto para el escritorio lujoso con lo cual el objetivo se cumple a medias. Conocer realmente a tu cliente requiere ir más allá y poner atención en los detalles.
En estas fechas donde muchos deseamos pasar un tiempo de calidad con nuestras familias, también es importante tomar en cuenta que sin nuestros clientes las empresas no existirían. Estos detalles son sencillos y alcanzables, los cuales valen más que aquella botella cara y lujosa que penosamente en varios casos he visto que no son del gusto del destinatario.
Deseo que tengan una semana llena de alegrías, dediquen tiempo de calidad a sus familias y recarguen energías para el 2016 que estoy seguro será un excelente año para nuestra industria. Feliz Navidad y gracias por leernos cada semana. #bebrainstormer navideño