La telefonía fija, una invención con más de 135 años de presencia en México, sigue siendo una herramienta de comunicación fundamenta, pese a la existencia de la telefonía móvil. 

En nuestro país, de acuerdo con el Instituto Federal de Telecomunicaciones existen 20.6 millones de suscripciones a telefonía fija. Sin embargo, se trata de un servicio que a menudo tiene a sus clientes insatisfechos ya sea por su calidad o porque los consumidores perciban que su costo es excesivo.

De acuerdo con el Estudio de Servicios de Telefonía 2015, realizado por el Departamento de Investigación de Merca2.0, el 70 por ciento de los usuarios que no han tenido problema con su línea telefónica no planean cambiarse de compañía proveedora, mientras que el 33.1 por ciento sí piensa cambiarse en el corto plazo.

Entre los usuarios que sí han sufrido problemas con su línea, el 71 por ciento optará en el corto plazo por cambiar de compañía, y un sorprendente 28.5 por ciento no se cambiará, pese a los problemas que presenta su servicio. 

En cuanto a la relación calidad-precio, preguntamos a nuestros encuestados si las tarifas que cobra su compañía telefónica se corresponden con la calidad del servicio. El 70 por ciento de quienes contestaron que NO se corresponde, calificaron su servicio como “regular”.

En cambio, quienes contestaron que SÍ se corresponde la calidad del servicio con su costo, el 83.8 por ciento lo calificó como “excelente”.