La productividad se ha convertido en uno de los principales ingredientes que debemos disponer y presumir para alcanzar el éxito en una sociedad fundamentada en la premisa de hacer “más con menos”.
Una de las mejores formas de incrementar la productividad es el trabajo en equipo, ya que puede potenciar exponencialmente los límites de eficiencia de cada individuo que colabora en un fin común. Es decir, suma la fuerza de trabajo de cada persona y multiplica su potencial al trabajar en conjunto.
No sólo se trata de más horas de trabajo aportadas por un grupo de individuos, sino de aportar mayor calidad y eficiencia por una unidad de personas que incrementan el tope del límite personal que cada integrante del equipo alcanzaría de manera individual.
Sin embargo, los equipos no siempre saben integrarse adecuadamente y cuando no funcionan adecuadamente el efecto puede ser completamente contrario, perjudicando individual y colectivamente a todos sus integrantes. A continuación, menciono 5 puntos que, en lo personal, considero importantes para poder integrar un equipo productivo:
Establece una visión común
Para integrar un equipo productivo exitosamente, es crucial que todos sus integrantes tengan una visión en común. Un equipo que comparte una visión, se enfoca, se energiza y obtiene confianza. Sabe hacia dónde se dirige y por qué debe llegar ahí. Implica que cada miembro del equipo debe comprender no sólo qué debe hacer, sino también para que lo debe hacer.
Suma las diferencias
Un equipo de trabajo heterogéneo se complementa mucho mejor que un grupo de integrantes con fortalezas y aptitudes similares, ya que para lograr soluciones sinérgicas se requiere siempre de múltiples ideas y aproximaciones. Hay que recordar la célebre frase del Maestro Steven Covey: “La fuerza reside en las diferencias, no en las similitudes”.
Establece los roles del equipo
Siempre habrá una actividad predominante en la que cada integrante de un equipo aportará el mayor valor agregado. Cada persona tiene talentos y habilidades que, si son identificados y explotados adecuadamente, aportará la mayor productividad al grupo y potenciará las actividades de sus compañeros.
Mantén UN enfoque desde distintas perspectivas
La productividad de un equipo puede reducirse drásticamente si los integrantes del equipo no mantienen un enfoque en común. Si bien, la perspectiva de cada quien es muy valiosa para aportar valor agregado al trabajo colectivo es muy importante que todos mantengan un enfoque común que rija los objetivos trazados.
Estos son las principales claves que, en lo personal, me han ayudado a incrementar la productividad de equipos de trabajo. ¿Conoces otras formas efectivas de trabajar en equipo? Quiero conocer tu opinión. Búscame en Twitter: @carlosluer para seguir la conversación. Nos seguimos leyendo por aquí.