El marketing de contenido tiene como fin ofrecer mensajes pertinentes para el consumidor, mismos que sean de su interés y le generen algún tipo de conocimiento, por lo cual las firmas comerciales deben determinar cuáles son aquellos temas que tendrán éxito en la comunidad y sobre ellos elaborar información valiosa en relación con los productos y servicios que ofrece.
Las estrategias de content marketing pueden ser muy exitosas en compañías que se dirigen al consumidor final es decir aquellas business to consumer (B2C), pero a diferencia de esto, también proveen de beneficios a empresas que apuestan por comercializar con otras compañías –business to business (B2B)– con el fin de complementar sus actividades comerciales.
En relación, estudios de Kapost afirman que dos tercios de las compañías business to business indican que las estrategias de content marketing son su principal combustible para generar una mayor demanda social.
El tema no queda aquí, ya que el 67 por ciento de las empresas B2B indica que el marketing de contenidos forma parte de su prioridad dentro de su estrategia global de marketing. Cabe señalar que el marketing de contenidos provee de cierta eficacia al mensaje, pues se elabora con base en estudios que indican las tenencias sociales que predominan en el mercado.
Sus beneficios no sólo se reflejan en los resultados que tienen con otras compañías sino que también de forma económica, debido a que análisis de DemandMetric afirman que el marketing de contenidos cuesta un 62 por ciento menos que el marketing tradicional.
Esto es un factor destacable, por lo cual estudios de IAB arrojan que el 73 por ciento de las empresas business to business dan paso a mayores estrategias de content marketing, cantidad que supera a las indicadas el año pasado.
Puede que las empresas B2B no interactúen de forma significativa con el consumidor final, pero sí conforman parte del proceso de los productos o servicios que éste recibe como cliente.
