México ocupa el segundo lugar mundial, sólo después de Turquía, en el que las mujeres se sienten más acosadas en su lugar de trabajo, de acuerdo con un sondeo de la Fundación Thomson Reuters y la Fundación Rockefeller.
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Una tercera parte de las mujeres de los países del G-20 han sufrido acoso en su trabajo, y lo consideran el tercer tema más desafiante en el ámbito laboral, sólo después de la dificultad para equilibrar su vida personal con su vida profesional y la brecha salarial entre hombres y mujeres, con lo cual, los tres problemas más importantes en la vida laboral de las mujeres tienen que ver con la desigualdad entre los géneros.
La encuesta arrojó que un 29 por ciento de las mujeres con empleos remunerados en países del G-20 han vivido acoso físico o a través de los medios online en su trabajo, y cuatro de cada diez mujeres lo ha denunciado.
En México, prácticamente la mitad de las mujeres (el 47 por ciento) considera el acoso como una preocupación en el trabajo, mientras que el 37 por ciento ha sido acosada. Argentina, Brasil y Arabia Saudita ocupan los lugares subsiguientes.
La encuesta, coordinada por Ipsos Global, entrevistó a 5 mil 600 mujeres entre julio y agosto de 2015.
La definición de acoso que ofrece la Organización Internacional del Trabajo es cualquier conducta no correspondida o no deseada que afecte la dignidad de una persona en el trabajo. Desde abusos verbales, gritos, insultos, bromas de mal gusto, a intimidación, hostigamiento y ataques físicos, aunque las y los expertos afirman que el tipo de acoso que más sufren las mujeres es el sexual. Este incluye -pero no agota- la exhibición de imágenes pornográficas, contacto físico indeseable, el uso de sexo a cambio de beneficios o derechos o a manera de amenazas para no ser despedidas.
Los resultados de este sondeo confirman la dificultad que las mujeres siguen teniendo para insertarse en igualdad de condiciones en el mundo laboral, lo cual solo puede ir en detrimento del bienestar general de todas las personas. Negar a las mujeres una participación plena en el mercado laboral y la economía es caro, específicamente nos cuesta 28 billones de dólares, de acuerdo con un estudio de la firma McKinsey & Co.
La igualdad plena en el trabajo añadiría un 26 por ciento al Producto Interno Bruto global para 2025, según los datos de este estudio. “Las mujeres son una parte crucial de la sociedad que está completamente desaprovechada”, dijo Anu Madgavkar, socia de McKisey & Co a la agencia Bloomberg.
De acuerdo con Bloomberg, algunas compañías que están haciendo algo por avanzar en la igualdad laboral son Wal-Mart, cuya división estadounidense tiene un programa para contratar a empresas proveedoras dirigidas por mujeres; o H&M, que ha establecido programas educativos en Bangladesh, en donde la gran mayoría de su ropa es fabricada por mujeres. Vodafone recientemente introdujo una licencia por maternidad de 16 semanas con paga completa.
Sin embargo, hace falta que las marcas y compañías abran los ojos ante la problemática del acoso laboral, que puede representar potenciales pérdidas económicas y en recursos humanos, cuando llevar a cabo acciones de prevención y de protección a sus empleadas podría significar réditos invaluables en términos de ganancias y reputación.