Tan sólo en México, el comercio electrónico tuvo un crecimiento del 34 por ciento el año pasado, pues sumó 162 mil 100 millones de pesos en comparación con el 2013, informa la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI). Cabe mencionar que el éxito no sólo es palpable en México, pues empresas transnacionales apuestan por incluir al e-commerce dentro de sus estrategias de marketing.

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Estimaciones de eMarketer indican que el país con mayor número de compradores a través de internet es China con 322 millones de personas que lo hacen. Estados Unidos se situa en el segundo lugar con 162 millones y Japón con 77 millones. Asimismo se indica que México ocupa el segundo lugar en cuanto a países con mayor porcentaje de crecimiento en compradores online con un 26.04 por ciento, India obtiene el segundo lugar con un 39.33 por ciento e Italia en tercero con un 16.90 por ciento.

El notable crecimiento de esta practica arroja resultados monetarios favorables para las marcas que así lo realizan, es conveniente mencionar que una de las industrias que más beneficios obtiene es la businness to customer (B2C), pues de acuerdo con el Global B2C E-commerce, el continente Europeo recauda 482.3 billones de dólares y Norteamérica  452 billones.

Es conveniente mencionar que a esta tendencia se le unen medios digitales de interacción social, como por ejemplo Pinterest y YouTube con botones especiales para hacer compra de productos. En consecuencia la apertura es cada vez más notable, por lo cual los miedos hacia este tipo de intercambio van quedando en el pasado.

Por el mismo rumbo, eMarketer, a través del sitio Mercado Libre asegura que las ventas a través de internet serán superiores a dos trillones de dólares el siguiente año, lo cual indica un crecimiento anual del 20.2 por ciento.

Dentro del análisis se destaca que Asia y Europa serán los continentes con mejores resultados en el tema. Por el lado de México se apunta que en 2016 se unirán a la tendencia más de 12.1 millones de compradores digitales.

El crecimiento apuesta por grandes cambios que mejoran la experiencia del consumidor –y dejan miedos atrás–, esto para que el sector tenga un mayor crecimiento. Lo anterior es conocido por marcas que ya no sólo apuestan por un medio físico y pasan a un plano digital.