Santiago, Chile.-  Un líder no nace, se hace. Es decir, muchas de las condiciones que se requieren para serlo están latentes en casi todas las personas, pero sólo algunos las desarrollan. La experiencia, el interés por la industria en la que se desenvuelve y la pasión por el trabajo con personas, son factores determinantes en la formación de un líder. Pero no basta, la continuidad y el éxito requieren estar atentos a ciertas cosas que a veces damos por sentadas, por lo que siempre es necesario hacer una evaluación de cómo se vive la posición de liderazgo.

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Qué tan bueno es tu equipo. Saber elegir a los profesionales de tu equipo es el primer paso y no sólo se relaciona con su calidad de ejecución. También es fundamental considerar su calidad personal, la capacidad de integración y el equilibrio que se consiga entre sus habilidades y su ego. Sinergia es una gran palabra, para lograr un gran equipo.

Qué tan buena es tu relación con el equipo. Puedes tener excelentes profesionales y personas magníficas, pero si no logras una fuerte relación con ellos, es poco probable que tus resultados sean óptimos. El líder no sólo es capaz de aunar criterios y conseguir un objetivo, sino que también logra que el equipo establezca una relación de lealtad con él o ella, pero no sólo en lo laboral sino que, idealmente, en lo afectivo. No tienes que ser familia, pero tienes que acercarte a ello.

¿Está toda tu gente alineada? En este punto volvemos al tema del ego. Todo creativo (las personas vivimos creando) tiene como capital sus ideas y por lo mismo, el ego a veces juega malas pasadas. Entonces el tan ansiado alineamiento se vuelve un tema complejo. Será tarea del líder equilibrar intereses y sensibilidades del equipo, con el objeto de conseguir que “todos remen hacia el mismo lado”, cosa que harán si cada uno de ellos se siente valorado en lo que puede aportar.

¿Visualizas cómo será tu empresa en 2 años más? No sólo los británicos se preparan con anticipación para lo que vendrá. La gente exitosa y en especial un líder, debe visualizar que sucederá más adelante. Un estudio de las condiciones y predicciones del mercado, más objetivos claros, facilitará el camino y te permitirá reforzar tu imagen de líder (ante ti y ante los demás)