México.- Todos conocemos a algún creativo publicitario que “se quedó en el ayer” y sus propuestas ya no aplican a la realidad actual, aunque se aferre a ellas. Te decimos cinco hábitos que deberías adoptar desde hoy para evitar convertirte en una persona que se caracterice por tener ideas viejas y descontinuadas.
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1. Tener proyectos creativos personales
En la agencia o en tus trabajos freelance se van la mayoría de las horas de la semana y casi todas tus ideas creativas, esto puede llevar a una zona de confort en la que se hacen las cosas como las quiere el cliente. Una manera de mantener viva la creatividad es realizar proyectos personales que no tengan otro fin más que explorar nuevas posibilidades y tal vez incluirlas en tu book.
2. Sacarle provecho a la tecnología
En la actualidad vivimos una era inédita en la que la tecnología ponen a nuestro alcance miles de herramientas para mejorar nuestro desempeño laboral y facilitar la vida personal. Usa las apps y servicios web que mejor se adapten a tus necesidades y no te cierres a la posibilidad de cambiar las que has utilizado durante años.
3. Consumir contenidos interesantes
¿Cuál es el contenido que recibes diariamente? ¿Sigues las mismas cuentas que los demás en redes sociales? ¿Tu tema de conversación del día se basa solamente en los trending topics? Consumir lo mismo que los demás es el equivalente a vivir en el pasado donde la televisión regía las modas, tendencias y formas de ver el mundo. Hay una gran cantidad de contenido que se genera todos los días pero pocos le prestan atención. Busca temas que te resulten relevantes, no sólo en internet, también en libros, películas y música.
4. Ver las cosas con diferentes perspectivas
Abordar las situaciones y temas desde la misma perspectiva puede ser una gran limitante para la creatividad. Pregúntate cómo lo vería una persona con características y condiciones distintas a las tuyas. Analiza los diferentes caminos que puede tener una idea y verás que a veces tu visión no es la más indicada.
5. Exponerse a cosas nuevas
Algo común que le pasa a muchos creativos es que se “casan” con sus ideas y visión sobre cómo deben ser las cosas e incluso hacen menos cualquier propuesta diferente. Esta actitud es contraproducente y tarde o temprano los clientes y agencias terminan por deshacerse de quienes no cambian acorde a los tiempos.
