Internacional.- La oficina de marcas y patentes francesa francesa (Institut National de la Propriété Industrielle), recibió una serie de solicitudes para registrar la frase Je suis Charlie como una marca, provenientes de un grupo de oportunistas.
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El rechazo de la oficina gala no tardó en llegar, a la vez que calificó esta acción como una llamada de atención ante el intento habitual de crear una marca, aprovechándose de una tragedia.
Tal es el caso del ciudadano belga Yanick Uytterhaegen, quien intentó registrar la frase como marca en Bélgica, Holanda y Luxemburgo, a fin de comercializarla en productos como camisetas, bebidas, fotografías y artículos deportivos.
La frase Je suis Charlie, que nació tras el atentado yihadista contra la revista satírica Charlie Hebdo provocó una enorme empatía entre la comunidad internacional, lo cual la convirtió en tendencia global en redes sociales.
Mediante un breve comunicado, la dependencia aseguró que un actor económico (persona) no puede adueñarse del eslogan debido a su amplio uso por parte de la comunidad.
Cabe destacar que de acuerdo con la BBC, esta frase fue creada por el periodista francés Joachim Roncin, quien únicamente cedió los derechos a Reporteros Sin Fronteras.
Fuentes: Notimex/Expansión
