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ChatGPT es el método de aprendizaje de idiomas preferido por los jóvenes japoneses frente a las clases presenciales.
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El auge de las herramientas basadas en inteligencia artificial podría estar desafiando el modelo de negocio de las academias tradicionales.
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La posibilidad de acceder a plataformas como ChatGPT en cualquier momento y lugar permite a los usuarios aprender a su propio ritmo, sin los límites de horarios establecidos en los cursos tradicionales.
Cada vez más jóvenes están optando por herramientas como ChatGPT para aprender idiomas, dejando de lado los cursos tradicionales. Este cambio plantea preguntas sobre el futuro de la educación de idiomas y el papel de las plataformas de IA en este sector.
En ese sentido, ChatGPT, desarrollado por OpenAI, se ha convertido en una herramienta popular para practicar inglés debido a su facilidad de uso, disponibilidad 24/7 y capacidad para adaptarse a las necesidades de los usuarios. Los estudiantes pueden practicar conversaciones, resolver dudas gramaticales y ampliar su vocabulario sin tener que asistir a clases presenciales o pagar costosos cursos en línea.
Hablar inglés se ha convertido en una habilidad clave para acceder a nuevas oportunidades, y muchos países latinoamericanos han adoptado este idioma como su segunda lengua. Según el último informe del English Proficiency Index de Education First (EF), Argentina continúa liderando la región como el país con el mejor dominio del inglés en América Latina, posicionándose en el puesto 28 a nivel global con una puntuación de 562. Este avance de dos posiciones respecto al año pasado destaca el esfuerzo sostenido en mejorar el manejo del inglés, aunque el nivel en sí se mantiene estable.
Este índice clasifica a los países en cinco niveles, desde “muy bajo” hasta “muy alto”. Argentina es el único país latinoamericano que alcanza el nivel considerado “alto”, lo que destaca su papel como referente en la región. Honduras, Uruguay, Costa Rica, Paraguay y Bolivia completan el top 5 de los países latinoamericanos con mayor nivel de inglés, mientras que Haití, México, Ecuador, Brasil y Colombia presentan los niveles más bajos en comparación.
Este fenómeno global es también visible en los países con un nivel “muy alto” de inglés, como Países Bajos, Noruega y Suecia, que dominan el ranking con puntuaciones superiores a 600. En el extremo opuesto, países como Azerbaiyán y Turquía presentan un nivel “bajo”, destacando la diversidad en la habilidad lingüística a nivel mundial.
¿Cursos de inglés en peligro? Jóvenes prefieren aprender en ChatGPT
Una de las razones principales por las que los jóvenes prefieren ChatGPT es su capacidad para mantener conversaciones interactivas y adaptativas. La IA no solo corrige errores, sino que también ofrece explicaciones detalladas y ejercicios personalizados. Esto permite a los usuarios avanzar a su propio ritmo y enfocarse en las áreas que necesitan mejorar, algo que muchas veces no es posible en un curso grupal tradicional. Además de ser más accesible, ChatGPT permite a los usuarios practicar sin la presión social que suelen generar las clases presenciales.
Precisamente, un estudio realizado por Duolingo en noviembre de 2024, que encuestó a 4,700 japoneses de entre 15 y 59 años, reveló que el 10.9% de los participantes utiliza ChatGPT para aprender idiomas, superando a las clases presenciales, que representan el 13.8%.
El uso de ChatGPT es especialmente notable entre los jóvenes de 15 a 19 años, con un 27.8% de ellos empleando chatbots de IA para el aprendizaje de idiomas.
Cuando se preguntó a quienes están aprendiendo un idioma cómo lo hacen, las “aplicaciones” siguieron siendo la primera opción, como en el año anterior, con un 58,3%, seguidas de los “servicios de vídeo” como YouTube con un 37,0%, los “libros de texto” con un 35,6%, las “clases en línea” con un 15,6% y las “clases presenciales” con un 13,8%.
El mayor aumento porcentual se observó en ChatGPT, elegido por el 10,9 % de los encuestados, que se introdujo en 2022. La cifra aumentó aproximadamente 1,8 veces con respecto al año anterior. Para las personas de entre 20 y 30 años, el uso de ChatGPT superó las lecciones presenciales y la radio.
Cuando se les preguntó si alguna vez habían utilizado chatbots interactivos de IA para aprender idiomas, el 27,8% de los jóvenes de entre 15 y 19 años y el 15,0% de los de entre 20 y 29 años respondieron que sí, lo que indica que esta tecnología es una opción de aprendizaje emergente para la próxima generación.
En respuesta a esta tendencia, el Ministerio de Educación de Japón actualizó en julio de 2023 sus directrices escolares, permitiendo el uso limitado de inteligencias artificiales generativas como ChatGPT en el ámbito educativo.
Estas directrices reconocen la importancia de que los estudiantes comprendan adecuadamente las IA y sus aplicaciones, al tiempo que advierten sobre posibles efectos negativos en el pensamiento crítico y otras habilidades.
Además, se enfatiza la precaución en el uso de IA por parte de estudiantes de primaria y se insta a considerar como plagio la presentación de trabajos realizados íntegramente con ayuda de inteligencia artificial.
El Ministerio de Educación tiene previsto seleccionar varias escuelas de secundaria y superiores para llevar a cabo una prueba piloto del uso de IA, con el fin de revisar y ajustar las directrices en función de los resultados obtenidos.
Y es que, a pesar de sus ventajas, el uso de herramientas como ChatGPT también tiene sus límites. Al no ser humano, la IA carece de la capacidad de identificar matices culturales o emocionales que son esenciales en el aprendizaje profundo de un idioma.
El auge de herramientas como ChatGPT no necesariamente significa el fin de los cursos tradicionales, pero sí los obliga a reinventarse. Instituciones educativas podrían integrar la IA en sus programas para ofrecer experiencias más completas y personalizadas. Por otro lado, los profesores podrían enfocarse en aspectos culturales y de comunicación humana que las máquinas no pueden replicar. Mientras tanto, los jóvenes seguirán aprovechando la accesibilidad y versatilidad de la inteligencia artificial, marcando una nueva tendencia en el aprendizaje de idiomas. La pregunta no es si la IA reemplazará a los cursos de inglés, sino cómo estas dos opciones pueden coexistir para enriquecer la experiencia educativa.
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