- Jack Cowin, fundador de Competitive Foods Australia, comenzó su imperio de comida rápida con una franquicia de KFC en Perth, Australia en 1969.
- Para financiar su primera franquicia, Cowin convenció a 30 personas a prestarle 10.000 dólares cada uno.
- Después del éxito inicial con KFC, Cowin expandió su negocio a hamburguesas (Hungry Jack’s) y pizza (Domino’s).
Jack Cowin, a sus 82 años, es un australiano multimillonario gracias a su emporio de comida rápida que nació de una franquicia de KFC.
Su empresa, Competitive Foods Australia (CFA), no solo opera Burger King bajo el nombre de “Hungry Jack’s” en Australia, sino que también lo ha convertido en el mayor accionista de Domino’s Pizza en ese país, y respalda “Y2food”, una compañía de sustitutos de carne de origen vegetal.
La historia de este magnate de la comida rápida, que es una verdadera lección magistral en emprendimiento, visión de mercado y perseverancia, es uno de los artículos más leídos en CNBC y es tendencia en las redes sociales.
Un inicio en el mundo del pollo frito
El camino de Cowin hacia el éxito en el sector de los restaurantes comenzó de manera peculiar. En 1969, trabajaba en ventas en Canadá cuando recibió una llamada de unos amigos que realizaban estudios de mercado para Kentucky Fried Chicken (KFC) en Australia.
La tarea de estos amigos era evaluar la viabilidad de la expansión de KFC en el continente australiano.
Cowin, siendo el único de su círculo que conocía la ubicación de Australia en un mapa, según él mismo cuenta, decidió viajar. Durante su estancia en Oceanía, Cowin colaboró con sus amigos en la investigación, que arrojó resultados positivos sobre el potencial del mercado de comida rápida en Australia, un sector dominado en ese entonces por restaurantes tradicionales como pescaderías, restaurantes chinos y establecimientos de alta cocina.
Al finalizar su viaje, Cowin apostó por el futuro del mercado de comida rápida en Australia y pagó un depósito de U$S 1.000 para obtener una franquicia de KFC, con la promesa de que si la compañía estadounidense decidía expandirse, él tendría la oportunidad de operar 10 establecimientos.
Seis meses después, recibió la confirmación de que KFC abriría operaciones en Australia, dándole la oportunidad de abrir su primer local.
Cowin tenía un problema: la falta de capital. Para solucionarlo, emprendió una audaz campaña de recaudación de fondos. Con mucha determinación, convenció a 30 canadienses para que le prestaran U$S 10.000 a cada uno, reuniendo un total de U$S 300.000.
De KFC a un imperio multimarcas
En diciembre de 1969, Cowin, junto a su familia, se mudó a Perth, Australia, donde abrió su primera franquicia de KFC. El éxito fue inmediato, lo que le permitió abrir dos establecimientos más.
Con la experiencia y el capital adquiridos, Cowin decidió diversificar su cartera e incursionó en el mercado de las hamburguesas y posteriormente en el de la pizza. De esta forma, sentó las bases para lo que se convertiría en un imperio multimillonario de comida rápida.
En la actualidad, Cowin posee el 98% de su empresa, mientras que el 2% restante pertenece a algunos de sus inversores y accionistas originales.
La clave de su éxito, según Cowin, radica en hacer bien lo que se hace. Para el canadiense, la línea que separa el trabajo del placer se difumina, ya que disfruta de lo que hace.
Su historia, que es tendencia por estas horas en las redes, es un ejemplo inspirador de cómo la visión, la perseverancia y algo de audacia pueden convertir una simple franquicia en un imperio empresarial.
Operaciones y estrategia de marketing
CFA no solo se limita a la gestión de restaurantes. La compañía también está involucrada en el procesamiento y distribución de productos alimenticios a través de marcas como Markwell Food y Comgroup Supplies.
Con aproximadamente 23,000 empleados, CFA es uno de los pilares en el sector alimentario australiano y neozelandés.
El enfoque estratégico de CFA incluye la innovación y la adaptación a las demandas del mercado. Esto le ha permitido a la empresa no solo mantener su relevancia en un sector altamente competitivo, sino también expandir sus operaciones a nivel internacional.
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