En el entorno laboral actual, las entrevistas de empleo se han consolidado como uno de los procesos más críticos para las organizaciones y los aspirantes. Lejos de ser un simple intercambio de preguntas y respuestas, estas entrevistas representan un punto de encuentro en el que ambos lados tienen la oportunidad de evaluar si sus objetivos, valores y expectativas encajan de manera armónica, ahora un jefe de empresa reveló el uso del test de la “taza de café” en entrevistas de empleo.
De acuerdo a información de Scielo, la entrevista es uno más de los instrumentos cuyo propósito es recabar datos, pero debido a su flexibilidad permite obtener información más profunda, detallada, que incluso el entrevistado y entrevistador no tenían identificada, ya que se adapta al contexto y a las características del entrevistado.
Este es el test de la “taza de café”
En el competitivo mundo corporativo, cada detalle puede marcar la diferencia al seleccionar a un nuevo miembro para un equipo de trabajo.
Así lo demostró recientemente, Trent Innes, exdirector general de la plataforma de contabilidad Xero y actual director de crecimiento de SiteMinder, quien compartió su polémica técnica poco convencional pero reveladora que aplica durante las entrevistas laborales para evaluar la actitud de los candidatos.
Todo esto lo reveló en una reciente participación en el podcast The Ventures, donde describió su curioso método conocido como “el test de la taza de café”.
De acuerdo a la ejecutiva esta prueba consiste en invitar a los postulantes a un breve recorrido por la cocina de la empresa, donde se les ofrece una bebida antes de iniciar la entrevista formal.
Pero, según Innes el verdadero examen se da al final del encuentro, ya que observa si el candidato toma la iniciativa de regresar la taza vacía a la cocina.
“Uno de los aspectos que siempre evalúo al final de la entrevista es si la persona está dispuesta a devolver la taza vacía”, comentó el ejecutivo.
Según Innes, este sencillo gesto, es un indicador esencial de la actitud del aspirante y su potencial encaje cultural en la empresa.
“Puedes desarrollar habilidades, adquirir conocimientos y experiencia, pero lo que realmente importa es la actitud”, explicó.
Y agregó que la filosofía detrás de este enfoque se resume en el concepto de “lavar tu taza de café”, una forma de mostrar consideración y respeto por el entorno común.
El ejecutivo aseveró que esta faceta pone énfasis en los pequeños detalles que reflejan valores como la humildad, la proactividad y la responsabilidad compartida. “En Xero, las cocinas siempre se mantienen impecables, lo que simboliza un compromiso con la creación de un espacio laboral limpio y armonioso”.
Para el exdirector general, que un candidato sea capaz de asumir la responsabilidad de tareas aparentemente menores, como devolver una taza a la cocina, puede ser un fuerte indicativo de su capacidad para integrarse en un equipo y colaborar con una actitud positiva.
La prueba de la taza de café no solo destaca la importancia de la cortesía y el cuidado de los espacios comunes, sino que también subraya cómo acciones simples pueden revelar la disposición de una persona a ser parte activa y respetuosa de una cultura empresarial.
Esta perspectiva abre un interesante debate sobre cómo las empresas pueden, a través de enfoques creativos, evaluar las cualidades humanas de los futuros empleados más allá de sus habilidades técnicas.
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