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Te decimos que es lo que pasará con tu deuda de Tupperware.
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Al menos el 80 por ciento de las compras de los compradores se hacen de manera emocional según statista.
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Las marcas pueden tener un asegunda oportunidad tras estar en quiebra.
Recientemente se anunció que la empresa Tupperware Brands, dedicada la creación de recipientes de plástico, se declaró en quiebra, lo que provocó un asombró entre los consumidores tras ser una marca consolidada en México, pero algunos se cuestionan que pasará con sus créditos actuales.
La marca comenzó el proceso para alojamiento en el capitulo 11 del Tribunal de Quiebras de Estados Unidos de Delaware, lo que provocó la caída de sus acciones en al menos el 50 por ciento. Así mismo, Laurie Ann Goldman anunció que el entorno macroeconómico no contribuyo de manera positiva a la empresa.
Una de las características de Tupperware fue se aceleramiento mediados de los años noventas, en donde se creaban fiestas de recipientes para poder conocerlos entre los círculos sociales, por lo que la venta fue más directa con respecto a lo que se podía comprender en esa época.
Se confirmó que la marca está en busca de la ayuda de los tribunales estadounidenses para que faciliten su venta, por lo que la noticia provoca una panorama de esperanza para la organización.
¿Desaparece mi deuda de Tupperware tras su quiebra?
Hasta el momento se desconoce si las operaciones en México cambiarían en algo, por lo pronto, las sucursales siguen promocionando los productos de manera habitual y vendiendo, por lo que los clientes que tengan una deuda provocada por algún crédito con la distribución oficial, se debería de pagar en tiempo y forma.
Los consumidores tienen la obligación de proporcionar su pago con respecto a lo estipulado, en caso de que no lo haga, se tiene que enfrentar a las normas establecidas por el negocio, incluso si estas incluyen a las autoridades.
Marcas en quiebra
Cuando una marca quiebra, las repercusiones pueden ser profundas tanto para la empresa como para sus empleados, consumidores y el mercado en general. La quiebra de una marca suele ser el resultado de problemas financieros graves, como la incapacidad de cubrir deudas o generar ingresos suficientes para mantener sus operaciones.
Este proceso implica la liquidación de activos, el cierre de establecimientos y, en algunos casos, la desaparición completa de la empresa del mercado. Sin embargo, más allá de las consecuencias internas, la quiebra tiene un impacto significativo en la percepción pública y en la confianza de los consumidores.
Una de las principales consecuencias es la pérdida de empleos, ya que el personal suele ser despedido cuando la empresa cesa sus operaciones. Esto no solo afecta a los trabajadores, sino también a la comunidad en la que la marca operaba, especialmente si era una gran empleadora en la región.
Desde una perspectiva de mercado, la quiebra de una marca puede crear vacíos que otras empresas pueden aprovechar. Competidores pueden capitalizar el espacio dejado por la marca en quiebra, atrayendo a sus antiguos clientes y aumentando su participación en el mercado.
Toy R Us
Un ejemplo notable es el caso de Toys “R” Us, que, tras enfrentar dificultades financieras por la competencia en línea y una gestión inadecuada de su deuda, se declaró en quiebra en 2017.
A pesar de los intentos de reestructuración, la marca cerró la mayoría de sus tiendas a nivel mundial, lo que afectó tanto a empleados como a proveedores y consumidores. Aunque la marca ha tratado de regresar con nuevas estrategias, el proceso ha sido complicado por el legado de la quiebra.
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