El Departamento de Justicia de Estados Unidos está considerando seriamente la posibilidad de dividir a Google para frenar su monopolio en el mercado de búsquedas en línea.
Esta medida surge tras un fallo judicial reciente que determinó que Google mantiene ilegalmente un monopolio en las búsquedas online, lo que marca un precedente significativo que podría alterar profundamente el funcionamiento de las grandes empresas tecnológicas.
La posible decisión de dividir a Google tendría implicaciones significativas no solo para la empresa Alphabet, Inc., sino también para el panorama del marketing digital en general, especialmente en el campo del SEO.
¿Qué significa esto para Google?
La división de Google podría implicar la separación de algunas de sus unidades de negocio más rentables, como el sistema operativo Android, el navegador Chrome y la plataforma publicitaria AdWords.
Cualquier restricción impuesta podría limitar la capacidad de Google de generar ingresos mediante su modelo de negocio basado en la publicidad, particularmente si se ven obligados a desinvertir en herramientas que gestionan anuncios de texto o si se limitan sus acuerdos predeterminados con fabricantes de dispositivos y desarrolladores de software.
Esto podría reflejarse en una disminución de sus ingresos y, por ende, en el valor de mercado de la compañía.
De avanzar la división, la medida obligaría una reorganización masiva en la empresa.
Dichas divisiones son centrales no solo para su modelo de negocio, sino también para su integración de productos y servicios. Una separación forzada podría afectar la sinergia entre los servicios de Google y debilitar su capacidad para ofrecer experiencias de usuario integradas.
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¿Cómo afectará esto al SEO?
Es pronto para definir cuáles serían todas las eventuales consecuencias de dividir Google podría acarrear para el SEO, sin embargo, podemos vislumbrar algunos aspectos que serían trastocados:
- Una mayor competencia en el mercado de búsquedas podría llevar a una diversificación de los resultados de búsqueda y a una menor dependencia de Google.
- La división de Google podría dar lugar a la creación de nuevos algoritmos de búsqueda por parte de las empresas resultantes. Esto podría requerir que los profesionales del SEO adapten sus estrategias para optimizar sus sitios web para estos nuevos algoritmos.
- Con una mayor competencia, es probable que las empresas de búsqueda se centren aún más en ofrecer resultados de alta calidad a los usuarios. Esto podría beneficiar a los sitios web que ofrecen contenido valioso y relevante.
Otras medidas que podrían aplicarse para frenar a Google
De acuerdo con medios estadounidenses como Bloomberg y The New York Times, el gobierno norteamericano también explora otras medidas menos drásticas, que podrían remodelar las operaciones del gigante tecnológico sin necesariamente desmembrarlo.
Una de las medidas contempladas implica prohibir a Google la realización de acuerdos que establezcan su motor de búsqueda como la opción predeterminada en dispositivos y aplicaciones de terceros. Un ejemplo es el acuerdo multimillonario con Apple, que asciende a aproximadamente 19 mil millones de dólares, mediante el cual Google se asegura ser el motor de búsqueda predeterminado en dispositivos la compañía fundada por Steve Jobs.
Eliminar la capacidad de Google para forjar tales acuerdos intentaría nivelar el campo de juego, permitiendo que otros competidores tengan una mayor oportunidad de ser elegidos por los usuarios.
Otra opción puede ser el obligar a Google a compartir más datos con sus competidores. Esta medida buscaría disminuir la ventaja competitiva que Alphabet Inc. y su buscador que ha acumulado a través del acceso exclusivo a vastos conjuntos de datos, los cuales son utilizados para mejorar sus productos y servicios, especialmente aquellos vinculados con la búsqueda y la publicidad. Al compartir datos con competidores, se podría facilitar una competencia más justa y fomentar la innovación en todo el sector.
El gobierno también evalúa cómo limitar que Google obtenga una ventaja desleal en el desarrollo de productos de inteligencia artificial (IA). Google, como líder en tecnología y datos, podría utilizar su posición para dominar también el emergente sector de la IA.
Por lo que al establecer restricciones específicas en cómo Google puede usar su data y tecnología en IA, se busca asegurar una competencia equitativa y evitar que se repitan los patrones de dominio vistos en otras áreas de su negocio.
