- Las cuentas verificadas de empresas ahora tienen la posibilidad de pagar un plan que cuesta 200 dólares al mes, no 1,000.
- El plan más económico proporciona casi los mismos beneficios, excepto la asociación de cuentas individuales de empleados.
- La medida busca permitir que más empresas, especialmente las de menor tamaño, accedan a los beneficios de las cuentas de suscripción.
Desde la entrada en escena de Elon Musk, obtener la codiciada insignia de cuenta verificada en la red social X (Twitter, bah), tiene un costo.
Lo que antes estaba reservado para cuentas con perfiles públicos, ahora está al alcance de cualquiera dispuesto a desembolsar los ocho dólares (aunque varía en algunos países) al mes que cuesta el servicio X Premium.
Sin embargo, para las empresas, este distintivo (en su caso de color dorado) tenía un precio mucho más elevado.
Adquirir la anhelada insignia de empresa verificada en X (Twitter) costaba la considerable suma de 1,000 dólares al mes.
Este alto costo ha mantenido a numerosas pequeñas empresas fuera del servicio premium de X, que, además de la insignia, ofrece un soporte técnico mejorado, una mayor visibilidad para los mensajes publicados y créditos para la publicidad en la red social.
Cambios en el precio de las cuentas verificadas de X
A partir de ahora, X presenta un plan más barato, con un costo de 200 dólares al mes, que entrega prácticamente los mismos privilegios y la deseada insignia.
La única diferencia con el plan de 1,000 dólares, aparte de una menor asignación de créditos para publicidad, radica en que el plan básico no permite la asociación de cuentas individuales como empleados de la empresa.
Desde X aseguran que este nuevo plan posibilitará que más compañías y organizaciones, especialmente las de menor tamaño, accedan a las ventajas de las cuentas de suscripción, publica este miércoles 3 de enero El Mundo.
Sin embargo, el cambio en la política ejemplifica lo intrincado que se está volviendo para Musk recuperar la inversión inicial realizada en Twitter.
La adquisición de la red social por parte del magnate en 2022, por la cifra de 44,000 millones de dólares, fue seguida por la reducción significativa de la plantilla y el incremento en los precios de los servicios de suscripción, todo ello en un esfuerzo por acelerar el retorno a los beneficios operativos.
Twitter y la publicidad
No obstante, los polémicos mensajes de Musk desde su llegada a Twitter han complicado las cosas.
Cerca de la mitad de los anunciantes ha dejado de invertir en publicidad o ha reducido drásticamente sus inversiones.
Musk también se enfrenta a un clima económico menos favorable, con tasas de interés elevadas para la deuda contraída como parte de la operación.
Fidelity, uno de los bancos que financió la compra, considera ahora que el valor de la red social ha disminuido en un 71% desde la adquisición de Musk.
Aunque X ya no es una empresa cotizada y sus cuentas no son públicas, todo apunta a que el tiempo de Musk para revertir las cifras negativas se está agotando.
El magnate confía en que el año electoral en EE.UU. impulse las cifras de inversión.
La rebaja en el precio de la suscripción a X Premium para empresas no es el único cambio reciente en la red social.
Musk, quien conserva el control del producto aunque no ostenta el cargo de presidente ejecutivo, decidió volver a introducir los titulares en los enlaces compartidos.
Esta característica fue eliminada en octubre del año pasado debido a que ocupaba demasiado espacio en la pantalla del teléfono y restaba atractivo a la experiencia de navegación, según dijo la red en ese momento.
Sin embargo, la eliminación fue duramente criticada por usuarios y medios de comunicación debido a la confusión que generaba.
Las noticias compartidas en X se presentaban solo con una foto y sin indicación de que era necesario hacer clic para acceder al artículo.
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