Santiago, Chile.- El trabajo en equipo nunca ha sido fácil y aunque las relaciones sean cordiales e incluso afectivas, para optimizar la labor y los resultados, es bueno considerar algunos puntos que faciliten el cumplimiento de los objetivos. Compartimos contigo 5 tips para ello.
Establecer reglas. Compartir los mismos códigos es la base para el buen funcionamiento de cualquier tarea. Como la formación de los distintos integrantes del equipo raramente suele ser muy similar, es imprescindible que se establezca una especie de protocolo de actuación que todos conozcan y respeten en el grupo. De esta forma, nadie se sentirá “pasado a llevar” o menoscabado en su rol.
Compartir ideas. Un equipo debe ser colaborativo, por tanto escuchar las ideas de los demás es el primer punto para tomar decisiones. El líder debe estar abierto a evaluar dichas ideas y aceptar los pros y los contras que postulen los demás a sus propios aportes.
Realizar pruebas de equipo. En coaching, los equipos son puestos a prueba en sus procedimientos, para que analicen cuáles son sus fortalezas y debilidades. Antes de cerrar un grupo, es conveniente intentar algunos desafíos de “juego” para evaluar el rendimiento del trabajo de equipo. El hecho de que todos los integrantes sean creativos y geniales, no siempre asegura un buen resultado.
Diversificar capacidades. En un equipo, cada integrante tiene roles diferentes, por lo que resulta fundamental mezclar y diversificar las capacidades. Habilidades blandas y duras, así como distintas visiones frente a la vida son necesarias para encontrar el equilibrio.
Ampliar la mirada. Cuando un plan de acción falla, por lo general lo hace porque el equipo ha estado trabajando en base a una visión particular, que se relaciona con la imagen interna de la empresa. Es bueno ampliar la mirada y ver qué sucede en el mundo exterior (competencia, mercado) al margen de la claridad que se tenga con respecto a los propios objetivos y la forma de conseguirlos.