Amazon ha demandado el pasado viernes, a su ex-empleado, Zoltan Szabadi, alegando que al haberse ido a trabajar a Google, ha violado el contrato de no-competencia que había firmado. Y es que cuando se trata de grandes empresas de tecnología, las peleas por el talento son con “uñas y dientes”, aunque todo parezca muy ‘limpio’.
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¿Y a dónde vamos con Google?
Szabadi, quien renunció a Amazon en abril y comenzó en Google en mayo, trabaja en temas de cloud computing y según publica la web TheWhir.com, el escrito introducido en los tribunales de Seattle, señala que “Szabadi estaba directa e íntegramente involucrado con el marketing del negocio de cloud computing de Amazon, hacia socios y distribuidores, y jugaba un importante papel en el desarrollo de la estrategia de negocio y dirección de esta área de Amazon.”
Amazon dice que su exempleado compartía información altamente confidencial y nombra 15 puntos clave, que habrían sido violados en el contrato de no-competencia que suelen firmar los empleados de estas empresas relacionadas con tecnología. Además le acusa de quebrar reglamentos de confidencialidad y lealtad, así como de apropiamiento de secretos de negociación.
Y parece que Szabadi no la tendrá fácil, pues según las información recabadas, su contrato de no-competencia, establecía que hasta 18 meses después de dejar Amazon, “no podía aceptar o solicitar hacer negocios con ningún sector, grupo o segmento del mercado del retail, que Amazon hubiese solicitado, señalado o aceptado, previo a la fecha de terminación” de la relación laboral.
Por su parte, tras la aceptación de empleo en Google, y la comunicación por parte de Amazon, sobre la situación, los abogados de buscador, han señalado que el caso de Szabadi se encontraría en una brecha, toda vez que el aceptó limitar el uso de la información que posee sobre Amazon y acerca de sus socios y contactos. De hecho el contrato firmado con Google, le prohíbe tratar a contactos y anteriores clientes, además de estarle vedadas las actividades de marketing y desarrollo de negocio, durante 6 meses
No es el primer caso en el que Amazon demanda a un exempleado por irse a trabajar a Google, pues ya en 2012, lo hizo contra Daniel Powers, exvicepresidente de Amazon Web Services, cuando se fue a laborar en el conocido buscador y aunque en aquella ocasión, los tribunales fallaron a favor del demandado, Amazon no piensa quedarse de brazos cruzados ante este nuevo ‘migración’ de talento.