Karen Ovseyevitz Schabes
Partner, President Latin America
Porter Novelli
En definitiva, una de las mayores enseñanzas que dejó el 2020 -el año de la pandemia-, es que la única constante en la vida es el cambio y, en ese sentido, el 2023 trae consigo nuevas tendencias y hábitos en las marcas y sus audiencias.
Dicho esto, queda claro que hablamos de un momento de cambio en el que las marcas deberán estar al tanto de las exigencias de los consumidores, los cuales, además de nuevos hábitos, cuentan con valores muy distintos en la actualidad.
“Las marcas tendrán en este 2023 que seguir buscando formas para que sus mensajes destaquen en un ambiente volátil y muy saturado. Algo que hará a las marcas destacar es la forma como se alinean a los retos globales de hoy en dĂa: la diversidad y la sustentabilidad. Los consumidores esperan hoy que las empresas y las marcas tengan un propĂłsito que va más allá de hacer dinero y mostrarán preferencia por las aquellas que demuestren claramente su rol en la sociedad y su compromiso por mejorar la vida de las personas, asĂ como el planeta”, señala Karen Ovseyevitz Schabes, Partner, President Latin America en Porter Novelli. Si bien es cierto que el 2022 fue el año de las reactivaciones y, por otro lado, el inicio de la era post-covid y, a su vez, la llamada “nueva normalidad”, misma que llega con retos interesantes para las marcas, sobre todo a la hora de conectar con las nuevas audiencias que nacieron con el boom de la digitalizaciĂłn.
“Las marcas deben, antes que nada, entender perfectamente a sus audiencias y lo que las motiva. Hemos visto campañas inolvidables en las que claramente hay un insight de la audiencia que la comunicación aprovecha. Esas campañas en las que le hablan directa y claramente a su público y que las hace destacar. Además, deben poder contar una historia con la que su audiencia se identifique y que esté alineada a sus valores. Deben poder mostrar congruencia entre lo que hacen y lo que dicen que hacen, y evitar engaños, promesas falsas y sobre todo evitar prácticas como el greenwashing o el rainbow washing, entre otras. De cara al futuro inmediato, la relación marca-cliente sufrirá un cambio verdaderamente importante; ya no se trata de una interacción de venta-compra, sino que hablamos de una relación en la que temas como “fidelidad” y “lealtad” seguirán cobrando relevancia dentro del propio mercado.
“En una Ă©poca de volatilidad financiera y con la inflaciĂłn al alza, las marcas tendrán que hacer más con menos, ser mucho más eficientes en sus inversiones”