La llegada del Papa Francisco a México, demuestra una vez más que las religiones también deben verse como nicho de mercado y que por lo tanto también deben aplicar técnicas de mercadotecnia en todos los sentidos, por supuesto, donde su objetivo principal es atraer la mayor parte de fieles para poder construir comunidades cada vez más grandes y resulta mucho mejor hacerlo en México, el cuál es uno de los cinco países con mayor número de católicos en el mundo y donde la efervescencia religiosa se incrementa cada vez que tenemos la visita de un Sumo Pontífice.

Por lo tanto, el marketing religioso puede traer beneficios de todo tipo, no solo para la religión que gana adeptos al aplicar cualquier técnica de mercadotecnia, también para muchas personas que aprovechan el júbilo de la gente con la llegada del Papa, en aras de vender toda clase de productos, generación de turismo, aprovechar políticamente la situación para colgarse medallas y esconder crisis económicas y también para mejorar la infraestructura para poder brindar una mejor imagen hacia el exterior. Todos estos beneficios que genera la llegada del máximo líder de la religión católica los describo a continuación:

1. Venta de artículos conmemorativos

Todavía no llega el Papa Francisco y ya existen cualquier cantidad de artículos conmemorativos que se venden en tiendas dedicadas a la venta de artículos religiosos, que van desde el poster tamaño real del Papa, medallas con la imagen de su Santidad, pulseras, cuadros, estampas, rosarios, figuras de todos tipos y tamaños, esculturas, veladoras y en una de esas hasta nos venden agua bendita traída directamente del Vaticano, bendecida evidentemente por el Papa Francisco. Y para como somos los mexicanos, pues son ventas muy seguras por ser un país con mayoría de católicos y que se vuelcan de alegría cuando el sucesor de San Pedro nos viene a visitar.

2. Se activa el turismo

No solo vendrán personas de otras partes de la República a los lugares a dónde acudirá el Papa Francisco, también se espera que llegue gente de Centroamérica, Sudamérica y una gran cantidad de fieles de Estados Unidos, por lo que la ocupación hotelera al momento se encuentra al tope, además de que los restaurantes y negocios aledaños se verán beneficiados por el turismo que ya llegó y está en espera de poder ver al Sumo Pontífice. Y debido a que la capacidad hotelera ha sido superada, ahora también se están rentando casas por donde pasará el Papa, así como marquesinas y azoteas para no tener que pelear un lugar al frente de las vallas. La derrama económica vía turismo representa alrededor de 3,000 millones de pesos. Nada despreciables por cierto.

3. Atraer más fieles a la comunidad católica

Una de las máximas de la mercadotecnia es atraer más consumidores al producto, y en esta ocasión atraer más feligreses a la comunidad católica será una de las intenciones que tiene el Papa al visitar México, pues la iglesia católica ha perdido muchos seguidores en los últimos 20 años, hasta estar apenas por arriba del 80% de fieles respecto de la población total en territorio nacional cuando se llegó a alcanzar más del 90%, por lo que el objetivo del Papa será regresar a esas ovejas que desertaron al redil.

4. Ganar ganar para la clase política mexicana

En estos momentos de turbulencia financiera, será un enorme respiro para la clase política mexicana en el poder, que la gente esté al tanto de lo que pase y ocurra con la visita del Papa a México, pero sobre todo, colgarse la medalla de haberlo traído nuevamente a nuestro país y así tener un momento distractor para toda la gente que está parada de pestañas por las pésimas decisiones del gobierno en turno en materia económica. Además habrá elecciones en 13 estados de la República Mexicana este año y ganar adeptos para el partido del poder en turno es una de sus máximas prioridades y qué mejor que colgarse de la imagen del Santo Pontífice.

5. El comercio ambulante sale beneficiado

Si hay alguien que se está frotando las manos en estos momentos, es el comercio informal, que tratará de vender de todo durante los recorridos que realice el Papa y dónde la gente comprará desde comida, hasta los artículos que servirán para amainar las condiciones climáticas en los diversos lugares a los que asistirá el Papa Francisco.

6. Se remodelan los recintos que visita el Papa

¡De ser posible que venga el Papa cada tres meses!, para que la infraestructura de las ciudades por donde hace recorridos el Papa sea remodelada o por lo menos le den su manita de gato para que se vea presentable el sitio o recinto que será sede de alguna actividad del sucesor de San Pedro. Qué pena que solo cuando nos visita una figura de tan grande envergadura, es sólo cuando los gobiernos tanto federal como local, se ponen las pilas y tratan de dar una buena imagen al resto del país y del mundo, lo cual debería ocurrir con o sin la llegada de un alto mando.

7. Altas ventas de publicidad en medios por la cobertura

Los medios de comunicación también se benefician con la llegada del Papa Francisco, principalmente las televisoras, pues los ingresos por pautas publicitarias y el alto rating que genera la cobertura de las actividades que realizará el sucesor de San Pedro evidentemente en un gran negocio que no se puede dejar de lado.

Por supuesto que la idea de venir a México del Papa no es la de generar derrama económica en el territorio nacional, eso es una consecuencia de su visita, pero viéndolo desde un punto de vista de mercadológico, es una gran estrategia venir a México, por ser el segundo país con más católicos en toda América después de Brasil, además de que sabe vender muy bien el producto, por ser un líder muy cercano a la gente y eso gusta como a cualquier consumidor que es tomado en cuenta y que sin duda ha tomado muy buen ejemplo del primer promotor de la mercadotecnia religiosa y que lo hizo muy bien, me refiero por supuesto al apóstol San Pablo.