La administración de empresas es el paso que necesitan dar los emprendedores para convertir sus compañías en grandes marcas, ya que requiere retos como proyectar objetivos, generar y administrar ganancias, facturar, entre otros.
Las marcas deben construir conexiones con sus consumidores y es una labor que parte desde la administración, quienes aportan un valor diferencial y una conexión con los clientes. Para ello, Inc recomienda tomar en cuenta los siguientes puntos:
Uno. Un administrador debe acercarse con las personas que maneja, ya que los gerentes son educados para no construir relaciones personales, por lo que una relación verbal ayudará a que el escenario laboral sea más confiable, antes de cualquier relación disciplinaria.
Dos. Los gerentes no deben ser mediadores en los conflictos de relaciones, ya que suelen ser absorbidos o invitados a intervenir, lo cual no tiene que ver con administrar una compañía, no obstante, una intervención directa puede ocasionar fricciones con empleados.
Tres. Al parecer, no es recomendable que los gerentes toleren conductas inapropiadas de empleados con alto rendimiento, como llegar tarde o tomarse tiempo extra, ya que al final será visto como favoritismo que posteriormente contaminará el ambiente laboral sano.
Cuatro. Solicitar voluntarios en lugar de dictar tareas extras, ya que un enfoque de voluntariado puede ser más eficaz porque el directivo notará un interés antes desconocido, además de que los voluntarios siempre estarán más comprometidos.
Cinco. Los directivos deben invertir más tiempo con los mejores empleados, puesto que una labor no escrita de un alto mando es el coaching, disciplina que solo aprovecharán los mejores empleados o recién reclutados.
Seis. Los altos mandos de las compañías también tienen por deber despedir directamente y explicar motivos, ya que en gran parte de los casos un empleado poco exitoso sabrá que su desempeño no es el mejor, por lo que si el directivo lo sabe y no actúa solo disminuirá el autoestima y aumentará el estrés del profesional.
Siete. Los gerentes también tienen por deber contratar personas que en algún momento podrían reemplazarlo, personas que aprendan rápido y se entrenen constantemente como una transición natural, aunque si la reputación del jefe es alta siempre atraerá a trabajadores de alto rendimiento.