EN tiempos de crisis y especialmente convulsos como los que se viven ahora, las empresas necesitan más líderes antes que simples jefes. Firmas como Google o Amazon lo saben de sobra.

Y es que en momentos como el actual, las empresas no pueden permitirse fallar, objetivo que solo se logra con un correcto manejo del capital humano.

La importancia de un líder

En este sentido, vale la pena recordar los hallazgos de ResearchGate los cuales indican que la tasa de fracaso ante los cambios dentro de una empresa va de entre 70 y 90 por ciento, en donde la investigación cita el factor humano como la razón principal del fracaso.

Es por eso que ahora mismo una de las soft skills más demandadas es el liderazgo. Esto va más allá de ser capaz de asignar tareas. La correcta gestión de los equipos de trabajo se traducirá en eficientar los recursos disponibles para alcanzar objetivos más altos con menos personal, capital y tiempo para logarlo. El liderazgo ha de ser fundamental para alcanzar el objetivo.

De esta manera, ocupar un cargo como líder o jefe de equipo puede no ser tan difícil como desempeñar un papel correcto dentro de esta posición. No basta con designar tareas o supervisar las mismas, las demandas son mayores y requieren de cualidades que son necesarias desarrollar.

Este se traduce, por tanto, en el pequeño gran detalle que hace de las grandes corporaciones, empresas referentes en el mercado y el mejor ejemplo es Google.

Durante más 10 años, Google se ha dado a la tarea de estudiar cómo debe ser un verdadero jefe para liderar con éxito a un equipo de trabajo.

Los 8 hábitos que debes desarrollar

Su estudio le ha permitido desarrollar verdaderos líderes en diferentes ramas lo que en suma se traduce en un posicionamiento único en el mercado en distintos campos de acción.

Hacia 2008, Google lanzó Project Oxygen, un compromiso para determinar las mejores cualidades de los mejores líderes. 

Con esta iniciativa la firma recopiló más de 10 mil observaciones sobre sus gerentes para determinar qué rasgos encontraron útiles los empleados y qué rasgos no eran atractivos.

Con este programa, Google desterró la idea de que los buenos líderes eran aquellos que teñían el mayor conocimiento técnico dentro de los equipos, para descubrir que aspectos como la accesibilidad, la comunicación sólida y el empoderamiento de los miembros del equipo se encuentran entre los rasgos más valiosos de los líderes verdaderos.

Considerando los hallazgos de este programa, compartimos los 7 hábitos que a los ojos de Google hacen a un buen líder:

Procura entregar al equipo

Un buen líder se convierte en el mejor entrenador del equipo para prepararlos ante situaciones que deberán resolver incluso cuando él falte. Esto se logra a través de comentarios personales y regulares en donde se guarda un equilibrio entre comentarios negativos y positivos.

Empodera al equipo

Si bien el líder es vital, lo cierto es que no puede y no debe resolverlo todo. El equipo debe sentirse con la libertad de expresas opiniones y propuesta que lleven a soluciones conjuntas.

Celebra los éxitos individuales 

Identifica aquellos elementos que son importantes para el equipo dentro y fuera del lugar de trabajo y entrega tiempo para reconocer logros tanto en equipo como personales. Se trata de reconocer a cada miembro como individuo.

Orientación a resultados 

Es importante nunca perder de vista aquello que el equipo quiere lograr de manera conjunta y los métodos que está empleando para conseguirlo. El trabajo de un líder en este sentido no es solucionar; sino facilitar el camino para establecer prioridades.

Escucha activa 

Es importante no ser la única voz. Establecer in ambiente que privilegie el diálogo abierto, directo y doble vía sobre lo que se espera en cuanto al rendimiento del equipo será crucial para administrar los recursos disponibles.

Desarrollo profesional

Es importante velar por el desarrollo profesional y crecimiento del equipo aun cuando este se encuentre lejos de tu área de manejo. Es decir, retener a un miembro por bueno que sea a sabiendas de que tiene una oportunidad de crecimiento en otra área o incluso en otra empresa será un error.

Visión clara

Por más acontecimientos extraordinarios que surgen, es vital atener el enfoque en las metas, esto incluye recordar y hacer parte del equipo la visión general que la empresa tiene sobre el trabajo que se realiza.