Tener hijos trae consigo muchas alegrías, que todo padre suele querer compartir, especialmente en las redes sociales que es el medio por excelencia cuando se trata de comunicar información a amigos y familiares. Sin embargo, lo que hace años parecía lógico e inofensivo, como es el mostrar a los hijos -menores de edad- en las cuentas de Facebook, Instagram o Twitter, ha derivado en nuevos retos para los adultos, cuando se trata de proteger a los más pequeños.

De hecho, por muy ‘normal’ que sea la reacción actual de compartir imágenes de niños, se deben tomar en consideración que se puede estar ofreciendo más datos de los que se desea o que esa información que se da, puede resultar contraproducente a corto, mediano y largo plazo.

Existe una razón por la que se debería incluso evitar publicar imágenes de ellos. Y se trata de su derecho a la intimidad. Puede parecer exagerado a muchos, pero a los menores de edad también les corresponde que este derecho que tienen, sea cuidado en internet y por supuesto más aun en las redes sociales, donde el material se publica, precisamente para ser visto por todos los contactos posibles del usuario.

El derecho a la intimidad, en el caso de España, queda protegido por diversos reglamentos tanto a nivel nacional como internacional, y es una obligación tanto de padres como del Estado, velar por que así sea. De hecho, los menores españoles cuentan con Ley de Derechos y Oportunidades de la Infancia la Adolescencia de Catalunya, la Ley española de Protección del Menor, el Reglamento de Protección de Datos de la Unión Europea y la Convención de Derechos de los Niños, para que esto se cumpla.

Y aunque pueda parecer excesivo tener que velar sobre lo que en principio es una actividad ‘inofensiva’, como padres es necesario que se considere a los menores -y sus derechos- a la hora de publicar imágenes de estos en las cuentas de redes sociales. Después de todo, la vida privada de los niños es de ellos, no de los progenitores, aunque estén a su cargo.

De hecho, países como Francia ya han establecido leyes según las cuales, un hijo puede denunciar a su padre por publicar imágenes privadas sin su permiso que consideren que les perjudican. Una acción que puede acarrear a los progenitores multas de hasta 45.000 euros.

En todo caso, si como padre aun le parece que puede ser una medida extrema el dejar de publicar fotografías sobre los más pequeños en las cuentas de redes sociales, lo que si recomiendan expertos, tanto en seguridad en internet, asociaciones de internautas como abogados, es tomar en consideración las siguientes medidas, para preservar, en lo posible, la seguridad de los menores de edad:

1. Evita dar los apellidos de tus hijos cuando los nombres. Utiliza sólo su nombre de pila para etiquetarlo. Aunque lo ideal es evitar etiquetarlos, para que su nombre no pueda ser indexado por los buscadores y de esta forma, no pueda vincularse su rostro con sus datos de identificación.
2. No publiques imágenes de tus hijos desnudos o con poca ropa. Como padre puede parecer graciosa esa imagen en la bañera en la que tu hijo de 3 años juega despreocupadamente. Pero colgarla en las redes sociales, no sólo servirá para mostrar a tu familia cuán gracioso es el niño, sino que podrías –sin que esta sea tu intención- estar poniendo en manos de pedófilos, depredadores sexuales y elaboradores de material pornográfico fotos o videos que no deseas que éstos obtengan para sus fines.
3. No ofrezcas información sobre el lugar donde vive tu hijo a través de la foto. Evita dar más datos de los necesarios. Mira con detenimiento las imágenes antes de colgarlas en la red social de tu preferencia, para no dar nombres de calles, logos, tiendas o cualquier otro dato que pueda dar cuenta de dónde vive. Incluso no publiques fotos en las que se vea a tu hijo junto a tu vehículo y la matrícula de éste.
4. Utiliza el email para compartir las imágenes que desees con familiares y amigos. Es más seguro.
5. Evita el exhibicionismo. No tienes porque publicar a diario imágenes de tus pequeños. Para preservar su intimidad, también es necesario preguntarse si es realmente ‘interesante’para los demás, que publiques instantáneas de todo lo que hacen tus hijos.
6. Si aparece otro menor en la imagen, pregunta a sus padres si te autorizan a publicar la imagen en las redes sociales. De igual manera, pide a tus familiares y amigos que te pregunten antes de publicar una imagen de tu hijo en internet. Por ley, en España, ambos progenitores deben de estar de acuerdo a la hora de subir alguna imagen de sus hijos a las redes sociales.
7. Revisa los ajustes de tus cuentas, para que la privacidad de tus publicaciones sea la deseada y puedas asegurarte de que las fotos de tus hijos solo podrán ser vistas por aquellos contactos que te interesan. Evita que sean del dominio público.

La seguridad de los menores de edad en internet, es un tema que debe tomarse en serio, incluso cuando se trata de la publicación de sus imágenes. Con estas medidas, se contribuirá a preservar el derecho que tienen a la intimidad, así como de otros peligros que pueden acecharles desde las redes sociales.