Sabemos que la industria laboral enfrenta enormes retos en la actualidad, comenzando por adaptarse a los nuevos estándares sociales que cada vez son menos permisivos en cuanto a abusos hacia los empleados.
En México la tendencia #MeToo demostró en la industria publicitaria y de marketing que el acoso y demás abusos como el moobing, que en otro momento eran sepultados entre las quejas en RH, ahora pueden derivar en una crisis de marca para empresas de todos los niveles.
La violencia es rechazada en todas sus expresiones y por ende desde las primeras instancias en las oficinas; sin embargo, muchos aún no comprenden por completo que las actitudes negativas hacia otros jamás serán dignas de un profesional, por ello todavía encontramos compañeros tóxicos.
Este adjetivo ha tenido auge, refiriéndose a las parejas amorosas, quienes dañan física, psicológica y socialmente a otra persona; lo mismo ocurre en el trabajo, cuando se debe lidiar con un colega de este tipo e incluso con un superior, las cosas se complican, pero no es imposible mantenerse al margen de su negatividad. Existen al menos 6 trucos para lidiar con un compañero tóxico en el trabajo.
Ve más allá del problema
El primer paso es tener conciencia acerca de que la toxicidad que padece el colega tiene un origen entre sus carencias y tratar de ser empático, no permisivo, pero sí un tanto comprensivo, sobre que la otra persona tiene un problema y en nosotros está que no crezca, sino enfocarnos en establecer límites de la manera más útil y amistosa posible. La actitud siempre debe ser mejorar y aportar.
La enfermedad y la cura
Determinar qué tipo de toxicidad padece te ayudará a encontrar la cura para esta. Existen los protagonistas, chismosos, manipuladores, flojos, descalificadores, protagonistas, etcétera. Observa y obtén un diagnóstico sobre la carencia que está cubriendo y trata de evitar encender la llama; es decir, si la persona es protagonista, no la hagas a un lado porque eso encenderá sus alertas y todo resultará en un ataque, déjala que se exprese lo que quiera y obtén lo mejor de eso, cuando se pueda, pero en tanto, tú concéntrate en tus labores y no centres tu atención demasiado en el colega.
Lo emocional no te hará ganar
Desde el preescolar hemos lidiado con compañeros tóxicos, en la mayoría de los casos se pueden dejar pasar los arranques; sin embargo, siempre llega el momento en el que podría molestarte tanto que tu único deseo sea responder, es el camino equivocado. Las emociones jamás te darán la mejor respuesta, respira hondo y cuando te calmes podrás reaccionar de la forma que debes, ya que tampoco se trata de dejar pasar todo y no establecer límites, simplemente toma acciones cuando tus emociones no te estén dominando.
Jamás respondas a los ataques
Siempre existen compañeros cuya forma de actuar es agresiva, la mayoría obtiene esa conducta desde casa, otros la ejercen como válvula de escape de sus graves problemas personales. Es por ello que no debes responder de la misma forma. La agresión lleva a más agresión y no al objetivo primario: mejorar y aportar. Al responder lo único que haces es reafirmar a agresor que su técnica funciona y que sus palabras tienen poder, promoviendo su estrategia. Sin embargo, cuando respondes con cortesía y calma, lo dejas sin armas y además demuestras tu liderazgo y valores.
Pon un alto
Si bien los trucos exponen que debes evitar el conflicto, esto no quiere decir que debas ser permisivo, sino que siempre que se pueda evitar se evita, pero cuando no, lo mejor es no dejar pasar mucho tiempo y poner un alto al colega. No actuar es enviarle el mensaje de que su pésima actitud contigo es correcta, entonces será mejor que le dejes claro que su actitud es agresiva hacia ti y que no lo vas a permitir, incluso si te sientes demasiado incómodo acude en primera instancia con tu superior a cargo, en segunda instancia a Recursos Humanos y si tus quejas no son escuchadas no descartes moobing y acude con las autoridades competentes.
Talento mata efecto tóxico
Algo que debe acompañarte en este proceso es tu talento, la manera en que tú haces las cosas y da resultados que nadie más puede hacer. Cuando tienes eso de tu lado, ni el más grande chisme o el complot más fuerte podrán derribar tu desempeño en el trabajo, por ende es clave que no te concentres en las actitudes de tu colega tóxico sino en tus labores. Esto no quiere decir que dejes pasar todo y veas lo tuyo, sino que concentres tu energía en tu trabajo, pero si la toxicidad te alcanza tendrás el mejor antídoto.
Recuerda que los más recientes estudios de especialistas en la industria laboral apuntan a que la competitividad forma parte de las prácticas obsoletas, lo de hoy es compartir, por lo que el propio segmento está desechando a los colegas con tendencias tóxicas y las empresas seguramente seguirán las tendencias.