Aunque te lleve un tiempo decidirlo, puede que alguna vez hayas pensando en dejar tu trabajo, bien porque hayas encontrado un nuevo empleo o bien porque quieres tomarte un tiempo sabático. Irse de un trabajo no tiene por qué conllevar ningún tipo de problemas, así que lo mejor es escribir una carta de renuncia voluntaria o llamada también como carta de dimisión.
Si quieres elaborar una, queremos que sea un proceso sencillo de realizar. Para ello, te vamos a ofrecer algunos consejos para elaborar la carta de renuncia voluntaria perfecta.
1.- Presentación
Debe estar escrita a ordenador, en un folio tamaño DIN A4 y con un tipo de letra sobrio y a color negro. También debe ser breve y concisa, sin que cuentes con adornos literarios ni redundancias.
2.- Datos previos
La carta de renuncia puede comenzar con un título a cuerpo mayor que el resto, en mayúsculas, negritas y subrayado. Luego indica a quién está dirigida. Después, alineado en el margen derecho, indica la ciudad y fecha de entrega de la carta. Es de vital importancia la fecha ya que a partir del día que pongas se cuenta el plazo de 15 días.
3.- Cuerpo de la carta
El cuerpo de la carta de renuncia debe ser escueto y sin alardes. Es decir, debes escribir tu nombre, documento de identidad y la decisión de causar baja en una fecha concreta, que será el último día de trabajo. Al final, debes poner “y para que así conste, firmo en el día de la fecha”.
4.- Agradecimiento
Agradece, en tu carta de renuncia, la confianza prestada. Puedes hacerlo antes de la coletilla final de la firma antes señalada.
5.- Firmas
Cuando ya hayas completado el cuerpo de la carta con tu renuncia, debes señalar también tu nombre y apellidos y, al mismo nivel, al lado, el nombre de la empresa o el de su representante legal (o ambas). El objetivo no es otro que bajo los nombres firmen ambas partes.
6.- Haz un duplicado
Debes hacer dos copias de la carta, una para ti y otra para la empresa. Ambas copias deberán estar firmadas por las dos partes.