Santiago, Chile.- Sucede cada cierto tiempo. Nos encontramos con ofrecimientos de compra de ‘seguidores’ por poco precio, lo que para algunos puede significar una tentación, porque, supuestamente, mientras más followers tienes, eres más influyente. Sin embargo, la verdad no va por ese lado. Revisemos por qué no es buena idea comprar seguidores.

En un planeta virtual, que sugiere muchos mundos, existen elementos concretos (productos, servicios, medición) que generan la base del negocio, uno de los aspectos de la empresa y un poquito de magia, dada por la creatividad de la estrategia de marketing digital. Pero para que esos dos planos coexistan, es necesario algo fundamental: interlocutores reales. Sin ellos, nada funciona. Esa es la primera gran razón. Luego, podemos revisar otras, derivadas de la principal.

Evidencia. Los seguidores falsos resultan evidentes. Ya sea porque no interactúan- sí, hay twitteros voyeristas, lo sabemos, pero son los menos- porque no tienen datos y son una cuenta seca en lo que se refiere a información.

Más no significa más. Es fácil juntar seguidores en forma manual, lo que no resulta sencillo es mantenerlos. Los números no significan necesariamente que seas influyente. Si tus contenidos son deficientes, probablemente comenzarás a perder a quienes no se interesen por tener una cuenta más que sólo les ocupa espacio.

El experto en redes sociales, Ian Anderson, agrega tres razones más, para no comprar seguidores,  que no podemos desechar.

Bajo nivel de engagement. Cuando compras seguidores no existe el interés por el tema, por tanto tienes poco crecimiento en lo que más te interesa: el compromiso por parte de tu audiencia.

Puedes terminar haciendo Spam. No siempre sucede, pero a ratos Twitter Follower ingresa en tu cuenta y envía mensajes a tu nombre, porque le resulta interesante la cantidad de seguidores que tienes. A tus verdaderos seguidores no les hará ninguna gracia.

Pérdida de tu reputación. En el mundo en que vivimos, la reputación se gana y se pierde rápidamente y la idea de comprar seguidores se asocia con algo que resulta un poco inmoral. Como es fácil darse cuenta, quedarás bastante mal – como persona o como empresa- tratando de aparecer más popular de lo que eres.

Y si estas razones no te parecen válidas, de verdad que el trabajo de conseguir más y mejores seguidores con el tiempo, al final se convierte en un desafío genial para el que ama esta industria. Pruébalo, no me creas.