Al igual que el personal que forma parte de una empresa requiere ser evaluado de manera constante, las empresas también deben contar con métodos de evaluación que confirmen si está logrando la excelencia en el mercado en el que se desarrolla, si los resultados que está obteniendo son los adecuados y si el desempeño global de la empresa puede ir mejorando conforme transcurre el tiempo.
Para lograr la excelencia empresarial será necesario articular diversos factores para maximizar el potencial que converge y que surge de esa sociedad llamada empresa.
Si queremos alcanzar el nivel de excelencia en una empresa, será necesario tomar en cuenta las siguientes consideraciones:
1. Evaluar el comportamiento de las áreas más importantes
Todas las áreas de la empresa tienen que funcionar de manera uniforme, aportar valor, lograr un desempeño extraordinario, a fin de conseguir el máximo esfuerzo con el propósito de lograr los ansiados objetivos y resultados plasmados en el plan de negocios.
Las áreas que tienen que estar sometidas a evaluación son Finanzas, Recursos Humanos, Operaciones, Investigación y Desarrollo, Ventas y Marketing.
2. Eficiencia organizacional
Para tener eficiencia organizacional debemos evaluar que tan bien se están haciendo las cosas en este momento y alcanzarla significa que estamos siendo competitivos en el mercado. Para lograr la eficiencia organizacional se requerirá fomentar una cultura de disciplina y compromiso con todos los integrantes de la organización, pues de ellos depende que se pueda obtener la eficiencia absoluta que se requiere para ser excelentes como empresa.
3. La empresa tiene que ser flexible
La empresa deberá mostrar amplia capacidad para adaptarse a cualquier cambio que ocurra, tanto de manera interna como de manera externa y ejercer una reacción rápida, correcta y sólida con objeto de enfrentar los cambios de la mejor manera posible, sin que la empresa se vea afectada y en caso de haber una afectación que sea la menor posible, sin poner en riesgo la marcha del negocio.
4. Innovación
Innovar significa introducir nuevos productos al mercado, hacer mejoras en el producto de tal forma que se pueda ofrecer algo diferente al consumidor de lo que actualmente se está vendiendo en el mercado y por lo tanto dará ventajas significativas a la compañía. El proceso de innovación en las compañías no depende de una sola persona o de un equipo dedicado a innovar, dependerá en gran medida de la lluvia de ideas que se generen en las juntas de dirección, gerencial o de departamento que se tengan en la organización y su implementación deberá ser tan rápida como se pueda, antes de que se nos pueda adelantar la competencia. Es de suma importancia que la innovación se pueda dar en tecnología, en diseño, en distribución, en el modelo de negocio, en el servicio al cliente y en el ámbito social
5. Servicio de primera calidad
En este punto no estamos hablando exclusivamente de servicio al cliente, que siempre tiene que ser de primera calidad, también estamos hablando de servicio interno de primera calidad, responder de la mejor forma posible a los requerimientos de nuestros clientes tanto internos como externos, debemos identificar quiénes son nuestros clientes tanto externos como internos y ofrecer un servicio extraordinario sin importar que se trata de un cliente externo o uno interno. Tenemos que lograr una satisfacción total tanto en los clientes externos como internos.
6. Esfuerzos agresivos internos y externos
Que estamos haciendo dentro de la empresa para mejorar continuamente, estamos contratando de manera adecuada y ofreciendo cosas distintas en el momento de reclutar, tenemos la tecnología que se requiere en estos tiempos para estar al nivel de los grandes corporativos, ofrecemos la capacitación adecuada al personal para que sea más eficiente en sus actividades y tenemos el conocimiento adecuado del nivel de comunicación entre las distintas áreas con las que cuenta la empresa. Es el momento adecuado para detectar si estamos teniendo problemas en lo anteriormente descrito y tomar acción para resolver los distintos problemas y tomar el rumbo adecuado que nos llevará a la excelencia.
En cuanto a esfuerzos agresivos externos se refiere a la capacidad de la empresa para tomar acciones concretas respecto a lo que están haciendo nuestros competidores, como reaccionar ante cambios demográficos que pueden afectar nuestros productos o evaluar el riesgo financiero que pueden producir las variables macroeconómicas.
En el entorno global en el que se están desarrollando las empresas, no queda más que buscar la excelencia organizacional, la cual hará que las empresas sean más competitivas, tendrán un mejor crecimiento y asegurarán una supervivencia a mediano y largo plazo, pues cada vez se requerirá de una responsabilidad corporativa integral donde cualquier falla en alguna de las áreas de mayor importancia dentro de la empresa podría ser la causa de erosionar la estrategia y planeación de mejoras continuas. Resultados excelentes implicará mucho esfuerzo y una ejecución excelente por parte de los miembros que integran la organización para tener mejoras constantes y con ello ser una empresa de excelencia.