Cada mes de mayo celebramos a las mamás, y así enaltecemos todo aquello que nos han enseñado a lo largo de nuestra existencia. Muchas son profesionistas y buscan equilibrar su vida laboral con la personal, mientras que otras se dedican completamente a su familia.
Sea cual sea el caso de nuestras madres, todas y cada una de ellas nos han llenado de experiencias y conocimientos que no sólo podemos aplicarlos en la cotidianidad, sino que también pueden ser trasladados al ámbito profesional para mejorar nuestra imagen.
Por esta razón, hoy te comparto 6 lecciones de liderazgo que nos enseñan las mamás y que podemos aplicar ya mismo:
Paciencia: se refiere a la capacidad de tolerar las adversidades con fortaleza. Nuestras madres lo han hecho con nosotros en esas noches interminables de insomnio o cuando buscaba todas las maneras posibles para hacernos comer.
Como líder, la paciencia es esencial en tu formación para superar exitosamente las situaciones que se te presenten, pues a tu equipo le brindarás la confianza para acercarse a ti cada vez que lo necesiten.
Negociación: ¿recuerdas los tratos con tu mamá para dejarte salir o ver televisión? De igual manera, es importante que generes acuerdos con tus clientes y equipo de trabajo donde sea un ‘ganar-ganar’ entre ambas partes, sin abusar del otro.
Resolución de conflictos: las mamás siempre buscaban que quedáramos en buenos términos con nuestros hermanos cuando peleábamos por algún juguete, o cuando había un conflicto con alguna amistad por un malentendido en la escuela.
En la vida profesional se presentarán situaciones donde, como líder, tendrás que solucionar efectivamente los problemas de tu empresa o con tus clientes, para así llegar a acuerdos mutuos.
Perseverancia: ésta es una habilidad que nuestras madres practicaban, por ejemplo, cuando estábamos por dejar el pañal, a veces con éxito o a veces no. Como líder, es importante ser persistente hasta lograr los resultados que se desean.
Inteligencia emocional: mamá estuvo a punto de perder la paciencia varias veces, pero mantenía la compostura sin que la dominaran las emociones. Debes trabajar en controlar tus sentimientos para que seas tú quien los controle y no estos a ti.
Transmisión de conocimientos: aprender a caminar, leer, el nombre de las cosas, ahorrar, respetar al otro y muchísimas cosas más nos enseñó cada una de nuestras madres, y sin ellas no seríamos quienes somos ahora.
Un buen líder también transmite lo que sabe a sus colaboradores para que aprendan lo necesario para su actual puesto, y además los impulsa a superarse a sí mismos. Cuando lograr que cada una de las personas de tu equipo crezca, tú creces también.
Estas 6 lecciones de liderazgo que nos enseñan las mamás son invaluables, y seguramente cada una de nosotras y nosotros podemos encontrar muchísimas más. Toma todos aquellos aprendizajes que puedan fortalecer tu branding personal y ¡aplícalos ya mismo!