Santiago, Chile.- No importa si eres experto o neófito en Social Media, lo más probable es que hayas adquirido algunos conceptos errados respecto a la extensión del significado del término en la industria. Revisamos algunas ideas.
Todo se refiere a redes sociales. No. Las redes sociales, como Twitter o Facebook, son sólo una pequeña parte de Social Media. El término en sí implica mucho más para un negocio, entregando cuatro grandes beneficios: comunicación, colaboración, comunidad y creación de oportunidades colectivas inteligentes. Entender esto, es el primer paso para capitalizar su potencial.
Es simple. Si bien es un sistema amigable, su utilización en marketing, no es simple. Dada la enorme cantidad de información relativa a Social Media, la justa utilización de sus herramientas para el éxito de una compañía, puede ser un tema difícil en términos de conseguir resultados.
No es importante. Social Media abre posibilidades en mercados enormes. La cantidad de profesionales y ejecutivos que tienen sus cuentas en las redes sociales más importantes, genera innumerables oportunidades de negocios de todo tipo. Es una información que no debiéramos ignorar. Al estar en las redes, tanto ejecutivos como empresas buscan lo mismo que tú: contactos.
Mentalidad negativa. Resulta común que gerentes y empresarios aún tengan algún prejuicio relativo a la implementación de redes sociales, porque piensan que generará problemas y malos comentarios. Si se invierte algo de tiempo en una política cuidada para los usuarios, las ventajas serán mucho más que los riesgos.
Identificación de restricciones. Las limitaciones invisibles siempre serán las más difíciles de identificar y éstas se relacionan, por lo general, con problemas de las personas. Implementar redes sociales implicará opiniones de la empresa, de los que saben y de los que creen que saben. Un consenso es fundamental para cumplir objetivos. Identificar quienes podrían generar limitaciones, es un buen punto para estar preparados y evitar la destrucción del proyecto.
¿Estructura de implementación? ¡Para qué! Es fácil entusiasmarse y disparar en cualquiera dirección, cuando se trata de redes sociales. Para evitarlo, se debe tener una fórmula de análisis interno y externo, además de desarrollar un enfoque sistemático, que permita optimizar los beneficios y mitigar los riesgos.