En la era de las redes sociales, las marcas, los creativos de contenidos y los community managers tienen una tarea muy específica: crear contenidos virales. Y es que en el mundo de las plataformas digitales, según el estudio “2015 State of Social Marketing Report”, las 100 compañías más importantes del mundo entre las que se encuentran Apple, Samsung, Disney, Coca-cola o Sony, orientan su estrategia en difundir sus mensajes por distintas redes, entre sus preferidas están YouTube, Twitter, Facebook e Instagram.
Pero, ¿cómo logra una marca crear un contenido viral? Por desgracia, todavía no existe la receta mágica para lograr que un contenido sea pegajoso, sin embargo, existen algunos factores claves que comparten los contenidos exitosos y que podrían ayudar a los creativos a convertir su contenido en el nuevo éxito de la red.
El conferencista y publicista estadounidense Jonah Berger analiza en el libro Contagious, nombrado por la American Marketing Association como el mejor libro de marketing en 2014, diversos ejemplos de epidemias sociales: casos en que productos, ideas y conductas se difunden.
El autor presenta 6 factores clave que dan forma a un contenido viral, que combinados con una estrategia de social marketing, la presencia en las plataformas correctas, y un poco de buena suerte dan la posibilidad de cumplir el sueño de la viralidad:
- El concepto social currency se refiere a la popularidad de la idea. Las personas hablan de cosas o productos que hacen que se vean bien. Dar a la audiencia una manera de verse bien, sentirse especial, o poseedores de una información privilegiada, con el objetivo de que pueda se corra la voz acerca del contenido.
- Los triggers, o disparadores, son recordatorios diarios de la idea del producto. Los disparadores tiene gran impacto en el comportamiento humano. Dan forma a las elecciones que hacemos, las cosas que hablamos, y los productos que compramos.
- La clave para evocar emociones de contenido profundas es la excitación. El grado de la emoción activa o enciende a las personas y en este punto son más propensas a compartir algunos contenidos sobre otros debido a que la excitación – ya se trate de la ira, temor, o el humor – nos evoca a transmitirlo.
- El público debe ser el objetivo primordial del contenido, así que el uso de logotipos, colores y otros elementos de diseño para hacer un producto más público facilita la adopción de productos y aumenta la probabilidad de que más gente se entere del producto o idea.
- El valor práctico de los contenidos se traduce en que la pieza más valiosa de información es la más se va a compartir en las redes sociales. Descuentos, recomendaciones de viaje, o artículos sobre la mejor protección solar son informaciones útiles que la gente compartirá en sus redes sociales.
- Por último, el storytelling es una narrativa que rodea la idea o producto y proporciona viralidad. Las historias son la manera de darle sentido a las cosas y la gente va a hablar acerca de un producto o marca si es parte de la narrativa más amplia.