Aunque esta es una pregunta que siempre ha estado en la mente de todo líder, la respuesta resulta cada vez más accesible, gracias a que hoy día existe mayor conocimiento sobre la psicología del lugar de trabajo. Pero sobre todo se ha despertado una mayor conciencia sobre las necesidades de los colaboradores y detectado la importancia de contar con mayor y mejor comunicación, así como mejores herramientas y tecnología laboral.
La empatía por parte del líder, no vista como una cortesía personal, si no como una estrategia profesional y parte de la cultura empresarial, mejorará automáticamente la productividad y el desempeño de los colaboradores. Ponerse en el lugar de los empleados y averiguar qué se debe hacer para mejorar la cultura laboral es una acción inteligente y productiva.
Ver y recompensar lo que hacen los colaboradores a nivel individual impulsará la realización personal y esto será el combustible de su productividad laboral. ¿Quieres que tu empresa o área aumente su productividad?… Entonces MOTIVA.
A continuación, hablaremos de cómo definir, medir y mejorar la productividad en la era del trabajo híbrido.
1. Aprendizaje. Promuévelo y facilítalo.
Según el Centro Nacional de Estadísticas Educativas de EU, brindar oportunidades constantes para la educación de los empleados es tal vez la mejor estrategia para aumentar su productividad. Existe evidencia de que brindar educación y capacitación continua logra este objetivo.
Las opciones de educación y formación pueden ser innumerables. Desde sesiones presenciales de capacitación, seminarios, platicas o conferencias grupales, entrenamientos en línea, hasta cursos formales con valor oficial.
Con esto le estarás enseñando a los empleados no solo como hacer mejor su trabajo o cometer menos errores, si no que permitirá detectar y corregir oportunamente falta de habilidades o experiencia.
En el momento en el que los equipos de trabajo cuentan con el mismo nivel de conocimientos, se enfocan de manera natural a mejorar las prácticas y procesos de su trabajo.
2. Tecnología. Provéela.
Proporcionar a los empleados las herramientas que necesitan es indispensable para aumentar la productividad. Sin las herramientas de trabajo adecuadas, los empleados se sentirán presionados, poco productivos y frustrados.
En EU la empresa Gallup hizo una encuesta, donde refleja que menos del 50% de los trabajadores creen que su empresa les proporciona la tecnología necesaria para realizar sus responsabilidades y funciones. Ahora imaginemos el resultado que podría reflejar esta misma encuesta en Latinoamérica.
Para no se parte de esto, aprovecha las tecnologías existentes y las emergentes. Cuando no estamos hablando de maquinaria o herramienta especializada, en muchos casos no son necesarias inversiones millonarias. Aprovecha los dispositivos móviles, herramientas de comunicación y colaboración en línea, los softwares comerciales de administración de proyectos y datos. Investiga sobre opciones alternas a los productos caros, casi siempre hay opciones de calidad a menor costo.
3. Cultura de la empresa. Enfatízala
Olvídate de centrar a tu empresa en el éxito individual y dar tanto peso a las jerarquías. Esto te aleja de la productividad mas de lo que crees. Enfatiza y prioriza la construcción de relaciones profesionales respetuosas, equitativas, colaborativas, pero, sobre todo, recompensa y motiva el trabajo en equipo.
Transmite esto con fuerza, junto a los objetivos, visión y ética de la empresa. Incluso desde la contratación misma. Ya que asegurará que hasta los empleados de nuevo ingreso trabajarán en pro del buen ambiente laboral e impulsarán a los empleados actuales.
4. Protocolos de comunicación. Fortalécelos.
La empresa que no fomente una robusta comunicación interna esta condenada a sufrir directamente en sus resultados.
Las empresas que no cuentan con políticas, métodos o herramientas para que sus líderes y colaboradores se comuniquen abierta, clara y constantemente, esta generando una serie de problemas que no solo afectan a la productividad. También en su ambiente y cultura laboral.
Los líderes deben hacer sentir a los colaboradores conectados con la misión y los objetivos de la organización. Deben ser accesibles con ellos y ser excelentes comunicadores de las expectativas y responsabilidades. Esto puede lograrse estableciendo o fortaleciendo protocolos de comunicación donde se establezca el tono (como se dicen las cosas), frecuencia (no abusar de comunicados o juntas), nivel (dar la información concisa a las personas correctas) y siempre permitir la retroalimentación.
5. Objetivos. Defínelos alineados al desempeño
Los empleados serán más productivos si están en condiciones de apuntar a metas alcanzables. El establecimiento de objetivos ayuda a los empleados a motivarse a sí mismos y a generar confianza en su capacidad para tener éxito.
Una vez identificados los objetivos, los empleados pueden seguir el sistema establecido internamente para analizar su desempeño y asumir su responsabilidad.
Establecer objetivos significativos para tu empresa y tus empleados puede impulsar un mejor rendimiento y una mayor productividad. También puede alentar a los empleados a colaborar y trabajar en equipo.
Los líderes deben consultar de manera frecuente con sus colaboradores sus objetivos y progreso personal y, a su vez, ofrecer recompensas por un trabajo bien hecho.
6. Reuniones improductivas. Limítalas
Trata de reducir lo más posible la cantidad de juntas, llamadas o reuniones no indispensables. Programar solo las reuniones que giren entorno a los temas que realmente requieren la presencia de las personas, como anuncios importantes, temas estratégicos o comerciales. Esto ahorrará tiempo que puede dedicarse a temas operativos y recursos valiosos para la organización.