Cuando un nuevo proyecto empresarial se emprende, surge con ese proceso la necesidad de crear una marca que no sólo otorgue una identidad a la incipiente empresa, sino que además transmita sus principios y, que a su vez, le permita consolidarse.
En la mayoría de las nuevas empresas no se cuentan con grandes presupuestos que le permitan invertir en recursos o especialistas en branding. Sin embargo, no siempre se requiere de poder económico para lograrlo, para desarrollar una marca sólida se requiere creatividad, principios y compromiso.
A continuación te presentamos 5 tips que pueden ser de ayuda para la construcción de una marca sólida:
Inicia con una visión. Define claramente cuál es el objetivo de tu negocio, el público al que quieres llegar y el mensaje que quieres transmitir. Ten en cuenta que los consumidores buscan invertir en un referente cultural o social, más que en un producto.
De hecho hasta el 63 por ciento de los consumidores a nivel mundial consumen una marca porque la consideran auténtica, más que por el producto en sí mismo, de acuerdo con el estudio Authentic Brands 2014.
Conéctate con tus clientes. La interacción bidireccional con los clientes es un factor clave para construir una marca. Es un error pensar que una marca puede alcanzar a todo tipo de consumidores o que no se preocupe por las necesidades de sus clientes. Hay que entenderlos y focalizarse en ellos.
Cabe destacar que de acuerdo con un reporte titulado “3 cosas que los CM deben saber sobre los social media y la experiencia del cliente”, el 83 por ciento de los consumidores dijo preferir cuando las marcas responden sus comentarios en redes sociales.
Productos con valor agregado e innovación constante. La construcción de una marca se define en gran parte en los productos que ofrece, por eso es de suma importancia que ofrezcan un valor agregado que los distinga de los que ya existen en el mercado.
Igualmente, es necesario que una marca siempre piense en la innovación, conservar esas cualidades que definen un producto pero también en buscar un cambio que mejore y que siga conquistando a los consumidores.
Mantente fiel a tus valores. Una marca no es un producto, es un concepto. Es importante ser congruente y mantenerse fiel a los valores que fundaron la marca. Cabe destacar que de acuerdo a un estudio de la Harvard Business Review, cerca del 91 por ciento de los clientes piensa que las marcas deben representar sus productos con honestidad.
Marcas que olvidan su historia están obligadas a repetirla. Las marcas más exitosas son aquellas que son conscientes de lo que las posicionó y no olvidan lo importante de repetir los aciertos, pero lo es más aprender de sus fundamentos, así como de los errores. Por ello vale la pena repetir que los consumidores se identifican con el significado de una marca, no de lo que puede representar un producto.