Además de político, Donald Trump, es una gran magnate y en su libro “Cómo hacerse rico” ha expuesto algunas reglas que, según él, son necesarias para llegar a conseguir el éxito. Si quieres saber cuáles son las más importantes, a continuación te las resumimos para que las pongas en práctica y logres conseguir el éxito en tus negocios y en tu vida diaria.
1.- Actuar como un general
Donald Trump, Consejero Delegado y Presidente de The Trump Organization, hizo un cartel en el que ponía “yo solo trabajo con lo mejor”, un cartel que perdura hoy en día. Básicamente, lo que Trump quería expresar con esto es que si eres cuidadoso al elegir tus empleados, el dirigir se convierte en algo bastante fácil. Gente buena equivale a buena gestión y buena gestión equivale a gente buena y es por eso por lo que ambos conceptos tienen que trabajar juntos.
2.- Aprovecha tu momento
Según Donald Trump, “no importa lo capaz que seas, no importa que pienses lo bien que conoces tu negocio, debes permanecer vigilante acerca de los detalles en tu campo. No puedes basarte en la experiencia o inteligencia. Incluso los mejores cirujanos necesitan reciclarse regularmente, para estar al día en las últimas investigaciones y métodos”. Es decir, el momento es algo que debes trabajar para seguir manteniéndolo.
3.- La responsabilidad empieza en ti
Para tener éxito, debes establecer un patrón y no esperar que tus empleados trabajen más duro de lo que tú lo hacer. Según Trump debes “mirar tu empresa como algo vivo, un organismo que respira, porque eso es lo que es”. No debes intimidar a la gente ya que si lo haces, nunca obtendrás una respuesta sincera de ellos y verás fracasar tus propósitos.
4.- Hazte dos preguntas
Si quieres ser alguien de éxito, hay dos preguntas que debes hacerte: ¿hay alguien que pueda hacer esto mejor que yo? y ¿qué es lo que no quiero ver? Con estas dos cuestiones podrás conocerte mejor a ti mismo y también a tu competencia.
5.- Elige la idea correcta
Al dirigir una empresa, para conseguir el éxito, tendrás que hacerte accesible a tus empleados y permitirles que puedan aportar ideas a la organización. Eso sí, asegúrate que cuando te aporten ideas, siempre elijas la correcta.
