La entrevista de trabajo es el momento clave para toda persona que está buscando un empleo. La llamada en la que se cita a la entrevista supone los primeros nervios para el candidato al puesto de trabajo. Es por eso por lo que tienes que ir preparado para así abandonar estos nervios que se pueden apoderar de ti.
A continuación te vamos a presentar algunas de las preguntas imprescindibles en toda entrevista de trabajo para que así puedas ir totalmente preparado.
1.- Cuéntame algo sobre ti
Esta es una pregunta abierta y que mostrará al reclutador lo mucho o poco que te has preparado la entrevista. Para estructurar tu respuesta, puedes hacerlo de la siguiente forma:
- Empezando con tu puesto actual, tus años de experiencia y hacia dónde quieres orientar tu carrera.
- Construye una historia y mantenla siempre en el terreno profesional.
- Inicia el discurso hablando de tus habilidades y explica cómo te han ayudado a prosperar en tu carrera.
2.- ¿Cuáles son tus puntos fuertes?
El error más común es contestar a esta pregunta con una lista interminable de adjetivos. Pero es mucho más efectivo dar respuesta con hechos concretos.
3.- ¿Cuáles son tus puntos débiles?
Al igual que la otra pregunta, el reclutador se sentirá muy frustrado si contestas con que siendo perfeccionista o que eres excesivamente dedicado.
Debes encontrar un punto flaco que sea sincero pero no demasiado dañino y explícalo de la forma más positiva posible.
4.- ¿Por qué crees que eres la persona adecuada para el puesto de trabajo?
Otra de las preguntas imprescindibles en cualquier entrevista de trabajo y sobre la que versará la misma. Para responderla, tienes que averiguar cuál es tu ventaja competitiva para el puesto y explicarla de forma clara y atractiva.
Toma la descripción del puesto y cruza la información presentada en tu currículum y hallarás tus puntos fuertes y así será mucho más fácil contextualizarlos para la empresa.
5.- ¿Dónde te ves en los próximos 5 años?
A la hora de responder a esta pregunta en una entrevista de trabajo, la mejor respuesta sería redirigir el interés hacia la empresa y contestar con algo tipo: “En 5 años espero poder estar trabajando en su compañía y contribuyendo a su crecimiento. Estoy muy interesado en su plan de expansión en los próximos años y considero que mi contribución puede ser muy positiva”.