México, D.F.-. De acuerdo con cifras de comScore, la calidad de la creatividad en la publicidad es un factor cuatro veces más efectivo y determinante para determinar el crecimiento de una marca dentro del mercado que los propios planes de medios.
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Así, la creatividad es pieza vital para asegurar la efectividad de una marca con lo que desarrollar esta habilidad es una tarea imprescindible dentro del universo marketero.
Sin embargo, existen muchos mitos sobre cuáles son las mejores prácticas para explotar la creatividad para convertirla en una cualidad efectiva y eficientes para la publicidad.
A pesar de que cada persona deberá de encontrar los mejores hábitos para desarrollar su creatividad, existen algunas ideas erradas y generales sobre cómo optimizar los procesos creativos.
En esta línea, tomando en cuenta información de AtTask, compartimos tres peligrosos mitos que -de seguirlos- podrían arruinar tu creatividad:
Trabajar con estructura elimina la creatividad
Para muchos creativos trabajar bajo estructuras y procesos estratégicamente planeados son acciones que pueden afectar las tareas creativas. Sin embargo, no hay que olvidar que dentro de la publicidad la creatividad tiene un trasfondo estratégico en donde cumplir con tiempos y objetivos es vital, razón por la cual trabajar bajo planes de trabajos bien estructurados permitirá ganar tiempo y fijar con claridad metas.
Nunca digas no
A menudo algunos creativos trabajan bajo la idea de decir “si” a cada proyecto que llega, a las sugerencias del cliente o a nuevos métodos para resolver una campaña publicitaria sin medir correctamente los beneficios o afectaciones que aceptar dichos aspecto puede tener en términos creativos y de eficiencia.
Dar una respuesta positiva a todo aquello que se presenta sin un análisis sobre lo que las nuevas propuestas pueden aportar sólo se traducirá en pérdida de tiempo, esfuerzo y recursos.
A más recursos mejor rendimiento
En muchos equipos creativos se tiene la idea errada de que la simple adición de recursos o más personal es suficiente para aumentar el rendimiento y la eficacia del mismo. Sin embargo, cuando esto se hace por razones no planeadas -como un aumento repentino en la carga de trabajo- el resultado no será positivo por lo menos en el corto plazo.
Es por eso que el equipo debe identificar sus necesidades, capacidades y debilidades y trabajar sólo con aquellos elementos que tienen la experiencia y conocimientos para resolver el problema que se tiene sobre la mesa.