Una frase que escuchamos todo el tiempo es que lo único constante es el cambio. ¡Vaya que lo estamos viviendo en estos tiempos de la pandemia! Por lo tanto una habilidad que te conviene fortalecer como líder es tu habilidad para adaptarte y saber qué, cómo y cuándo cambiar algo en tu organización. Hoy me gustaría mencionar 5 grandes etapas para el cambio y qué habilidad requieres como líder para realizar cada etapa exitosamente.
1. Ubica tu nuevo entorno y sé un visionario
Lo primero es identificar qué parte de tu entorno ha cambiado. Es probable que la necesidad que antes atendía tu organización haya cambiado, así que empieza por entender el contexto dónde tienen que operar. Saber cómo han evolucionado las necesidades de tus clientes, es el primer paso de este proceso de cambio.
Después es momento de inspirarte y ajustar tu visión al nuevo entorno. Revisa si necesitas ajustar tu propósito y razón de ser y sobretodo identifica nuevas oportunidades que han surgido para poder aprovecharlas y construir planes de negocio para alcanzarlas.
2. Reconoce dónde hacer cambios siendo humilde y empático
La necesidad de cambio existe en todas las organizaciones, incluso en la tuya. Lo importante será que identifiques dónde es necesario hacer el cambio. Piensa cómo puedes atender las nuevas necesidades de tu cliente, qué áreas están fallando, cómo puedes ser más eficiente y cómo puedes apoyar mejor a tu equipo.
Para hacer esta reflexión tanto individual como grupal, será importante que seas humilde para no aferrarte a proyectos o aspectos de tu liderazgo que necesitan cambiar y también estar abierto a la opinión de tu equipo y otros colegas. Tu empatía será clave para que tu equipo tenga la confianza de darte malas noticias y compartirte aquellos aspectos de su trabajo que no estén funcionando. Esto sólo pasará si ellos se sienten seguros y en confianza contigo como líder.
3. Promueve la toma de riesgos calculados y aprendizaje continuo
Ya que han identificado dónde hacer los cambios, promueve la toma de riesgos calculados en tu equipo. Da libertad de decisión y ejecución empoderando a aquellas personas de tu equipo con la capacidad de crear expectativas y a su vez ejecutar los planes y poder evaluarlos con la realidad. Tener un proceso de planear-ejecutar-evaluar-ajustar-iterar será la clave para la evolución del cambio de expectativas a una realidad exitosa. Lo importante será que cuando cuestiones a tu equipo lo hagas con el objetivo de “pensar fuera de la caja”, romper paradigmas y salirse de su zona de confort.
Otorga autonomía a las personas de tu equipo que lleven el proceso antes mencionado y sé claro en qué tipo de situaciones deben comunicártelas de inmediato. Y aunque la autonomía va de la mano con la responsabilidad, es importante que sientan tu apoyo y sobretodo tengan claridad de cuándo involucrarte si alguna situación sale de ciertos parámetros (previamente establecidos por ti).
4. Innova en el ecosistema promoviendo la colaboración y confianza
Busca crear nuevas alianzas e involucrar a nuevos jugadores en el ecosistema de tu organización o equipo. Piensa tanto en colaboraciones internas (rompiendo los silos tradicionales dentro de tu organización), como proveedores, alianzas externas y nuevos clientes. Este tipo de colaboraciones, basados en la confianza y beneficio mutuo, serán clave para analizar y resolver aspectos del contexto que los rodean de una manera distinta a como tradicionalmente lo hacen tu y tu equipo. El objetivo es agilizar tanto el flujo de información, como toma de decisiones y ejecución alrededor a nivel producto, cliente o región. Estas nuevas colaboraciones deben brindar beneficios a todas las partes involucradas.
5. Mantén el cambio teniendo una comunicación y dirección efectiva
Para lograr que el cambio sea permanente, comunica constantemente los beneficios de estos cambios tanto para la organización como para los individuos que deben hacerlo realidad. A los seres humanos nos gustan las rutinas y cuando hay algo que requiere que hagamos las cosas de distinta manera, siempre surge una resistencia natural. Por eso es tan importante que comuniques constantemente, con transparencia y claridad. Asegúrate de que se establezcan procesos alrededor de los nuevos cambios, para evitar errores y pasos muy manuales que sean complicados o difíciles de ejecutar. Esta parte debe de estar acompañada del entrenamiento necesario para realizarlo así como definición de roles y responsabilidades para todos los miembros del equipo y organización.
Si vez que hay algunos miembros de tu equipo quienes son más resistentes de lo normal al cambio, habla con ellos para entender el origen de su resistencia y apoyarlos en hacer este cambio. Si con el paso del tiempo estas personas se vuelven detractores de los nuevos cambios en la organización, probablemente tengas que tomar otro tipo de decisiones. Desafortunadamente no todas las personas cambian al paso que lo requiere el entorno y la organización.
Ser abierto, ingenioso, empático, humilde y colaborativo son sólo algunas de las habilidades que tendrás que tener como líder para navegar en un entorno volátil, cambiante e incierto.
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