Puede que ya se tengan planteadas las metas de lo que se quiere conseguir y se esté trabajando en ello, pero el camino hasta ellas puede hacerse más largo de lo que se espera y mantener la motivación para llevar al final, convertirse en un reto en sí mismo.

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Para que esto no suceda, la psicóloga Homaira Kabir, desde la web Happify, da 5 claves, basadas en investigaciones científicas, que ayudarán a no dejarse vencer por el cansancio o el hastío, como lo son:

1. Practique la autocompasión

La tendencia a la comparación social y búsqueda de la perfección puede hacer que las metas se vean demasiado lejanas. El miedo a fallar puede ahogar nuestra mente, saboteando la motivación que se tenía. Para evitarlo, las investigaciones señalan que ser amables con nosotros mismo, nos fortalece. Coloca tu mano en el pecho y pronuncia algunas palabras de comprensión y ánimo que te ayuden a pasar el momento y frenar al critico interno que se lleva dentro.

2. Apóyate en otros

Los estudios muestran que la fuerza que dan los sistemas sociales de apoyo es una gran fuente de resistencia, éxito y felicidad. Por ejemplo, cuando se toma la decisión de perder peso, tener a otros que nos guíen o nos recuerden la meta, nos ayuda a mantenernos en el carril.

3. Administra tus energías

Según el psicólogo Jim Loehr, cuando se va tras un objetivo se debe maximizar la energía, no el tiempo. convertirse en multitasking, para ahorrar tiempo, nos agobia, deja exhausto y logra que nuestros resultados sean pobre.

En cambio, si nos enfocamos en nuestra fuentes de energía, alcanzaremos el Summit con gusto. Lo que quiere decir que debemos cuidar la energía física, la emocional (mantener la calma y las emociones bajo control), la mental (controlar nuestra atención) y la espiritual (conectarse con el propósito que dirige tus metas).

4. Divide tus metas en ‘objetivos’ más pequeños

Nuestra motivación depende enormemente del sistema de dopamina. Cuando nos planteamos un objetivo, necesitamos ‘inyectarnos’dopamina nosotros mismos, para mantenernos animados a seguir. Reasegurarnos constantemente que nos sentiremos recompensados al final de nuestra búsqueda es combustible para nuestro cuerpo/mente. Afortunadamente, aun el logro de la más pequeña meta, brinda a nuestro cerebro, la motivación necesaria para seguir, por lo que se recomienda no plantearse la meta de forma tan monumental que se debas esperar demasiado para sentirte recompensad. Divídela en etapas y cúmplelas, aunque no siempre te apetezca. De esta forma te mantendrás recompensado de forma constante, para completar el cumplimiento del fin último.

5. Saborea el éxito

No te olvides de saborear el éxito. Según el neuropsicólogo Rick Hanson, el cerebro actúa como un velcro para lo negativo y como el teflón para lo positivo. A menos que te tomes el tiempo para reconocer tus logros y aplaudir tus esfuerzos por el trabajo bien realizado, no ayudarás a tu estructura neuronal a construir el tiempo de recuerdos que te aportan fortaleza y resistencia. Se suele rumiar hasta el cansancio lo negativo, con lo que se crea un banco de recuerdos de los fallos, en vez de resguardar lo positivo.

Por último, Kabir ofrece un pensamiento motivador. Todos tenemos la capacidad y determinación de mantenernos en el camino para lograr una meta y por ello recomienda recordad que todos los niños cuando comienzan a caminar, se enfocan en el presente y no se rinden ante las continuas caídas y obstáculos. Se enfocan en el objetivo que tienen delante y al que quieren llegar, literalmente, paso a paso.