Internacional. El proceso de rebranding, es una de las estrategias globales más utilizadas para regenerar los números de una empresa. La transformación de logos, nombres, imágenes institucionales o slogans son los caminos que ocupan los estrategas de marketing para cambiar la percepción de los consumidores. brindándoles así, mayor seguridad y apego hacia los servicios de los particulares.
Más notas relacionadas:
El rebranding global de Disney Channel
AS Roma continúa su rebranding con nuevo estadio multiusos
El rebranding más grande de los próximos años
A pesar de que como estrategia es muy efectiva, cambiar el giro o revolucionar una compañía puede ser un movimiento muy arriesgado y susceptible a múltiples errores. Los especialistas en la materia aseguran que hay que anticiparse y planear la estrategia de forma íntegra, ya que por su misma naturaleza es compleja.
Sin embargo, aunque el proceso de rebranding requiera mucha investigación, hay marcas que no siguen las reglas y fracasan en el intento. Por esa razón hay que considerar los siguientes puntos que evitarán cometer errores durante la renovación de una empresa:
1.-Negarse a contratar a un consultor de branding
Para los especialistas del portal ReBrand, la ayuda de un profesional en el sector no es una opción, sino toda una obligación. Aseguran que no está mal acudir con una agencia nueva con ideas frescas en la materia, pero los servicios y la opinión de un experto son fundamentales en un proceso tan delicado.
2.-Concentrarse en el nombre y logo
Para la autora y especialista en negocios, Ilyza Pozin, uno de los errores más comunes de las marcas durante las estrategias de rebranding está en concentrarse en los nombres y logos. Ilza apunta que “golpear a la mascota no cambiará los problemas de la empresa, los puede hacer más grandes”. El número de testimonios de marcas que apuestan por una nueva imagen sin considerar las consecuencias es alarmante. El último ejemplo de fracaso en este aspecto lo protagonizó McDonald’s.
3.-No entrar en los zapatos del cliente
ReBrand indica que los líderes de proyecto se deben de tomar el tiempo para navegar en el sitio web de la empresa, comprar los productos, pedirles a sus familiares y amigos que les brinden sus impresiones y recolectar todas esas experiencias antes de entrar a la sala de juntas. El no hacerlo, provocará fallas y rechazo en los objetivos de la nueva cara de la compañía.
4.-Dificultad para integrar elementos
En su artículo publicado en TheNextWeb, lyza Pozin indica que muchas empresas ignoran la integración sistemática de la marca y la cambian por los embrujos de un “nuevo y brillante logotipo”. Ella añade que todo, desde las prácticas financieras hasta las políticas de recursos humanos deben integrarse a la estrategia de rebranding.
5.-Navegar sin un plan
Por su parte, los analistas de ReBrand, mencionan la importancia del proceso de planeación como medida previa y eje fundamental del proceso. Señalan que el análisis de la situación, los objetivos, los mercados de destino, el presupuesto y los recursos inmediatos son parámetros que permitirán el correcto desarrollo del proyecto.
Aunque el cambio puede resultar difícil de asimilar, una estrategia de rebranding puede ser el último y mejor recurso de una compañía para integrarse al mercado global. Las nuevas tendencias de comunicación en la era digital, obligan a las industrias a rediseñarse por completo para integrarse de lleno en las plataformas electrónicas y a sus consumidores.