Las historias guardan poderosos recursos con los que marcas logran comunicarse con audiencias y estos son algunos elementos creativos que han potenciado su alcance.
1. El Chavo del 8
El Chavo del 8 nos demostró el poder que tiene una historia y el alcance que tiene cuando logra generar efectos en nostalgia y otros elementos que causan empatĆa entre las audiencias.
Los valores que promueve el Chavo del 8 asà como la identificación que las audiencias latinoamericanas encontraron en los problemas cotidianos que enfrentaban cada uno de los personajes, fueron clave para lograr que la serie no solo acumulara un exitoso nivel de rating, sino que se convirtiera en una oportunidad clave en licensing, merchandising y nuevos formatos como una serie animada.
En medio de la experiencia que ha ofrecido la historia de El Chavo, una inmobiliaria realizó un estimado de cuĆ”nto deberĆa en rentas Don Ramón, el popular personaje que se hizo popular por nunca liquidar los 14 meses de renta y que alcanzó en deuda, segĆŗn el estimado, los 882 dólares.
2. Los Simpsons
Una agenda polĆtica y la historia cotidiana de una familia estadounidense fueron los elementos clave para que la historia de Los Simpsons se convirtiera en una de las mejores apuestas de Fox, gracias a que la fórmula de personajes animados e historias empató con la cotidianidad de las audiencias.
3. Luis Miguel
La historia que reside detrÔs de cada uno de las celebridades se convirtió en una importante apuesta, con la que las plataformas de streaming como Netflix, lograron beneficiarse gracias al poder que tienen las historias personales.
4. Alf
Un peludo ser extraterrestre fue la mejor estrategia creativa con una una historia como Alf se convirtió en una de las series con mayor impacto dentro del mercado de medios, durante cuatro años en que la cadena NBC la mantuvo al aire.
5. The Big Bang Theory
Con unos de los protagonistas mejor pagados en el mercado televisivo, The Big Bang Theory logró que la divulgación cientĆfica se convirtiera en una poderosa estrategia de contenido comercial, gracias a que contaron con una narrativa identificada con el santo grial del mercado: los millennials.