Después de ganar un segmento del mercado con el lanzamiento de un producto, una marca debe expandir sus alcances y ganar nuevos clientes con una estrategia de marketing digital. Cuando una marca es nueva, tiene desventajas, ya que sus futuros consumidores no la conocen y solo una estrategia de social media podría cambiar esa percepción.
La creciente popularidad de las redes sociales sigue marcando tendencia, ya que juntas suman a más de 3 mil millones de usuarios en el mundo, por lo que los beneficios de anunciarse en ellas suena más que lógico. Según LinkedIn, el 90 por ciento de las marcas utilizan herramientas digitales para lograr un mayor rendimiento y consiguen cerrar ventas en un 71 por ciento. De acuerdo con Wasp Barcode Technologies, el 45 por ciento de las pequeñas empresas utilizan las redes sociales para atraer a nuevos clientes, sin embargo, muchas de ellas suelen cometer los mismos errores:
Hablan con las personas incorrectas. Interactuar todo el día con los cibernautas no significa tener una conversación con las personas correctas o clientes potenciales. Para evitar eso, las marcas deben recopilar datos primero para profundizar más, así como averiguar lo que convence a la gente para comprar.
El perfil en redes sociales no es profesional. Para que una marca atraiga clientes debe tener un aspecto confiable y serio en redes sociales, ya que es una extensión de la compañía, además de que una mala imagen digital sería como “atender una gala en pijama”. Lo conveniente es actualizar perfiles con los aspectos más profesionales de la industria para generar confianza en los clientes.
Carecer de objetivos. Actualmente, las herramientas y plataformas de social media tienen pocas posibilidades de mejorar las ventas si no se sabe utilizarlas. Lo ideal es comenzar estableciendo una cuota para alcanzar y seleccionar perfiles de clientes específicos, ya que cuanto más claros sean los resultados, será una mejor evaluación.
Utilizar pocas herramientas para muchas tareas. Existen demasiadas herramientas para cada red social, ya que las marcas no pueden aumentar por sí solas las ventas, ya que los resultados siempre serían negativos. Lo ideal son las plataformas de gestión de relaciones con clientes, herramientas de venta inteligentes, de redes sociales, aplicaciones de productividad y de seguimiento de email marketing.
Apoyarse en métricas incorrectas. Existen todo tipo de métricas para cualquier publicación en sitios web, no obstante, las marcas deben encontrar la forma incorrecta de vincular esos puntos de datos hacia sus objetivos, es decir, debe recopilar y analizar los datos con precisión.