3.- No cuidar la ortografía
Un correo con faltas de ortografía, redacción descuidada o que no ha sido revisado por lo menos dos veces antes de ser enviado, va a despertar horror y críticas. Perderás a tus posibles clientes por falta de profesionalidad, así que asegúrate de leer lo que envías y que esté todo bien escrito, para que no se vayan errores de dedo, ni ortográficos. Si no estás seguro de cómo se escribe una palabra o de algún acento, recurre a internet o a un corrector de textos.
4.- Mandar más de un correo al día
Los boletines deben llegar una vez al día y a un horario decente, no más. Si mandas montones de mails el cliente terminará hartándose y pensando que llenas su correo de spam, no importa que tan buenos contenidos tengan, lo más probable es que ni siquiera se molesten en leerlos. Junta la información precisa para un sólo correo y con uno será más que suficiente.
5.- Que sean demasiado largos
En Business News Daily indican que “no hay nada peor que leer un mail que haga scroll para siempre”, y recomiendan que en cuanto a e-mail marketing se trata, no escribas una novela, porque es incómodo de leer y cansado, especialmente si estás en un dispositivo móvil. Escoge la información correcta que sepas que va a hacer impacto en tu audiencia.