Instagram cuenta con más de 800 millones de usuarios en el mundo, pero la compañía podría superar los mil millones para 2018, lo que la convierte en la red social fotográfica más grande, además de ser una plataforma indispensable para las marcas, debido a la facilidad de experimentar el crecimiento viral.
La red fotográfica está tan de moda, que un contenido viral puede provocar que una marca gane más de 2 millones de seguidores nuevos, lo que significa múltiples fuentes de ingresos para una compañía, no obstante, existen modos de ganar seguidores, aparte de crear y postear contenidos virales. Se trata de una estrategia, donde las empresas realizan un seguimiento detallado del comportamiento de sus usuarios.
Contenidos de calidad. Instagram pide calidad en las publicaciones de marcas, ya que sus algoritmos actualizados limitan la proyección de contenidos mal estructurados o deficientes, es decir, si no es atractivo no será viral. Contenido con el que las personas quieran participar, en lugar de pensarlo nada más.
Leer los comentarios. Cuando una marca comience a probar ideas de contenido, debe escuchar a su público y prestar atención a los comentarios de cada publicación, ya que cuando alguien se toma el tiempo de comentar, es importante tomarlo en cuenta. Lo correcto es hacer toques personales, al principio, ya que eso puede generar tracción de crecimiento. Es vital tomarse el tiempo para construir una relación sólida con los seguidores, ya que un mayor engagement ocasionará un efecto de “bola de nieve en crecimiento”.
Ser específico. Una marca debe idear el contenido más creativo y sólido y apostar por él, por lo que si sabe que tendrá éxito es porque ya logró comprender a su audiencia. Sin embargo, una vez que se desarrolla una estrategia de contenido exitosa, y resistir las tentaciones de diseñar contenido general y genérico, ya que eso podría alejar a la audiencia y perder seguidores.
Identificar los tiempos de publicación. Hay horarios “pico”, lo cual generará un mayor engagement con los usuarios de la red social. Es como un prime time de participación en Instagram. Lo idóneo será experimentar con diferentes tiempos de publicación hasta que surja un patrón emergente. Para ello, se tienen que identificar los tiempos de contenidos importantes.
Pensar en los seguidores. Vender siempre puede ser un error, ya que los usuarios tienen el poder de negociación cuando se trata de dejar de seguir, por lo que se debe pensar en lo que quieren solo los seguidores de la marca, desde un influencer, hasta una estrategia de marketing sólida. También será importante establecer un calendario de contenido estricto que esté comprometido con cada publicación periódica, ya que cuanto más contenido se publique, más datos e información se podrá recopilar.