La “capacidad de logro” es una de las cualidades que suelen ser más valoradas hoy en día. Tener un alto índice de logros parece el deseo de muchos y refleja múltiples características positivas, hábitos y capacidades que distinguen a una persona de muchas otras.

Todas las personas nacemos con ciertos atributos, cualidades y competencias que se traducen en aptitudes que nos permiten tener mayor facilidad para destacar en ciertos ámbitos de nuestro entorno. También es cierto que vamos desarrollando con el tiempo actitudes, que modelan nuestro comportamiento hacia los eventos y actividades que hacemos día a día.

En la medida en la que seamos capaces de explotar al máximo nuestras principales cualidades, orientarlas con claridad hacia un objetivo concreto y sincronizar nuestros hábitos, habilidades, competencias y rasgos de personalidad, es que podremos incrementar considerablemente nuestras posibilidades de logro en las cosas que nos proponemos.

A continuación, enumero las 5 bases prácticas para incrementar la capacidad de logro:

1. Elige una dirección y mantén el rumbo
¿Cómo vas a llegar, si no sabes a dónde vas? Saber lo que quieres, cómo y cuándo lo quieres es fundamental para poderlo alcanzar. La medida en la que seamos capaces de visualizar nuestros anhelos, corresponde a la fuerza y claridad con la que los alcanzaremos. La voluntad y la determinación son los dos ingredientes clave que potencian la dirección y dan rumbo el rumbo para lograr las cosas.

2. Centra tu motivación en el porqué
Todas las actividades que llevamos a cabo siempre tienen un qué, un cómo y un porqué. La mayor parte de la gente sabe siempre qué es lo que hace (trabajar, barrer, lavar, dormir). También hay mucha gente que conoce el cómo se hacen las cosas (entre más se conoce el cómo hacer las cosas, más se destaca con relación a los que saben menos). Sin embargo, hay pocas gentes que saben el porqué. El porqué es el verdadero motor que impulsa al cómo y al qué. En la medida en la que seas más consciente de tus “porqués”, podrás trabajar más en tus propias causas y no en las de alguien más.

3. Explota tus fuerzas y habilidades
Todos tenemos fuerzas y debilidades. En lugar de estar tratando de tapar y corregir tus defectos. Enfoca esa energía y atención en maximizar tus rasgos fuertes. Definitivamente y por mucho, será más efectivo para hacer un cambio positivo en tu vida.

4. Obtén siempre un aprendizaje
Aprender es siempre esencial. No sólo se trata de buscar recetas instantáneas que te digan cómo hacer mejor “x” cosa. La disposición de aprender de uno mismo es mucho muy efectiva para encontrar los porqués y los nuevos rumbos que nos hagan mejores personas.

5. Acostúmbrate a los errores
Equivocarse es parte de la vida. Todos cometemos errores. El secreto está en aprender de éstos y convertirlos en conocimiento que nos ayude a ser mejores.

¿Sabes lograr lo que te propones? Me encantaría conocer lo que piensas. Participa en este espacio y recuerda seguir la conversación en Twitter @carlosluer. Nos seguimos leyendo por aquí.