En México, son alrededor de 52.9 millones las personas económicamente activas; es decir, que tienen algún tipo de empleo, formal o informal, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).

De ellos ¿cuántos serán productivos? Diversos estudios en el mundo, se enfocan en encontrar formas de que los empleados sean felices en sus puestos de trabajo, ya que se trata de un factor que impulsa la productividad.

De acuerdo con Martin Seligman, de la Universidad de Pennsylvania, existen cinco elementos que ayudan a las personas a lograr la felicidad y que son aplicables en la oficina, con la posibilidad de que el empleador tenga total control de estas; es decir, que dependen de ellos:

Positividad. Es imprescindible que el empleado tenga emociones positivas en su entorno laboral para que no sólo se contagie de ellas sino que les dé continuidad. La labor del empleador entra desde que detecta un colaborador que rompe con ese mood de posibilidad y no hace nada al respecto, es mejor perder un elemento que la armonía de la oficina.

Sueldo. Uno de los factores es el sueldo, cerca del 50 por ciento de los egresados de alguna carrera han tenido como primer sueldo entre los mil y 4 mil pesos mensuales, según indicó la Encuesta de Universidades 2017 del Departamento de Investigación de Merca 2.0. Esta es una oportunidad para el empleador, de ofertar un sueldo justo que permita al empleado desarrollarse mejor en la compañía.

Red de apoyo. Sentir que tiene en la empresa un apoyo para servicios de salud o en casos extremos como accidentes, etcétera, resulta básico para que el empleado sienta la seguridad necesaria para ser feliz en el empleo.

Significado de la vida. Como cada persona necesita saber cuál es su papel en la vida, un empleado necesita sentirse indispensable para la firma en alguna función que desarrolle mejor que otros, esto lo motivará.

Sana evaluación. Depende totalmente del empleador una evaluación sana y no una crítica destructiva sobre el desempeño de los empleados. Esta debe ser desarrollada con cuidado y aunque esto no es indicador de que se felicite al empleado por todo, los errores deben marcarse con cuidado.