• Desde el 14 de enero se mantiene un bloqueo de vías en Michoacán, lo que afecta a las marcas y al consumidor

• Se han quedado parados 180 trenes, es decir 8 mil 600 contenedores o 1,750 toneladas de productos detenidos

• El sector automotriz es el más afectado por el bloqueo

Desde el pasado 14 de enero se mantiene en Michoacán un bloqueo ferroviario por parte de miembros magisteriales, quienes buscan de esta manera atender sus peticiones a las autoridades correspondientes, sin embargo, esto ya representa un impacto al consumidor derivado de la falta de productos en algunas zonas.

Desde el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) se lanzó una petición a los gobiernos locales y federales de resolver esta situación, “No podemos permitir que medios estratégicos como las vías de comunicación ferroviarias, sean sujetas a extorsiones políticas por parte de grupos minoritarios. Atropellas los derechos de los demás, es injustificable”, sostuvo el organismo a través de un comunicado.

Por lo que de continuar con este hecho podría generar diversas afectaciones al consumidor, a continuación te presentamos 4 razones.

1. Problemática mayor.

Según cifras publicadas en diversos medios, durante la primera mitad de 2018, Puebla se colocó como la entidad en la que se realiza la mayor cantidad de robos a trenes con el 17.5 por ciento; un aumento del 53.4 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2017.

La Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario sostuvo que durante en el lapso referido se cometieron 293 atracos, esto significó un promedio de al menos uno diario.

A Puebla le sigue Guanajuato, incluso se dijo que a esta práctica ilícita se le asoció con el robo de combustible, las dos entidades mencionadas también lideran el Huachicoleo a nivel nacional.

En tanto otras entidades en las que hay robo de trenes son Jalisco, Estado de México, Sonora, Veracruz, Coahuila, Querétaro, Tlaxcala, Hidalgo, San Luis Potosí y Zacatecas.

Mientras que, en obstrucción de vías, Puebla, Hidalgo y Zacatecas lideran el indicador.

2. Impacto económico.

Según el CCE, la situación en Michoacán es grave, ya que hasta el momento más de 180 trenes no habían logrado pasar, lo que se tradujo en 8 mil 600 contenedores detenidos y más de mil 750 millones de toneladas en insumos y productos; esto propicia pérdidas diarias de mil millones de pesos, sin contar los daños colaterales.

Esto no solo impacta a las grandes empresas, sino a todas aquellas firmas nacionales así como extranjeras que participan en la cadena de valor, familias y estudiantes de la zona, sostuvo el Consejo.

El sector automotriz resultó uno de los más afectados puesto que genera una derrama económica en 259 actividades relacionadas, además de que representa 22 por ciento del total de empleos de la industria manufacturera.

3. Seguridad empresarial.

Tal y como sucedió en Chilpancingo, Guerrero, así como en los estados del país que presentan altos índices de inseguridad, las firmas deciden abandonar la zona o el país lo que se traduce en falta de inversión, así como de productos para los consumidores, quienes se ven afectados por la falta de abastecimiento de mercancías por el temor de las firmas a ser víctimas de algún delito.

Esto merma la posibilidad de tener productos de calidad, al tiempo que encarece los presentes, además de que se genera un desabasto que, puede ser un riesgo para la población.

4. Desempleo.

En caso de que la situación se convierta en una problemática mayor, derivado del enfrentamiento a esta conducta criminal así como a la lejanía de las empresas, el desempleo puede incrementarse algo que impacta directamente al consumidor, puesto que no tendría recursos para cubrir sus necesidades.

De tal modo que atender esta situación así como mantenerse al tanto de la evolución de los hechos será clave para los profesionales de la mercadotecnia puesto que se trata de una situación e logística que va directamente de la mano con las estrategias, puesto que se debe garantizar al consumidor que los productos y servicios necesarios estarán disponibles.