Un factor común en todas las agencias de publicidad es definirse como “creativas”, prometiendo innovar y catapultar a una marca hacia el éxito, por lo que esta palabra se ha convertido en un arma de dos filos, ya que al ser una constante en todas las agencias deja de ser atractiva para los posibles clientes, sin embargo, la ventaja es que esta palabra bien aplicada y respaldada con los argumentos necesarios, será la carta más fuerte de una agencia de publicidad. ¿Qué factores son los que marcan la diferencia y realmente denotan creatividad?
1.- Adoptar lo nuevo
En una era marcada por la tecnología es una necesidad imperiosa para los publicistas mantenerse al tanto de todo lo nuevo que acontece en el mundo, comprenderlo y aplicarlo acertadamente a la publicidad con la capacidad de generar una simbiosis con elementos clásicos, sin forzar mensajes ni situaciones.
2.- Buscar nuevas formas de decir lo mismo
Actualmente es difícil sorprender al consumidor, ya que las grandes ideas se han explotado hasta el cansancio, es por ello que es importante revolucionar esas propuestas para que sean capaces de impresionar y seducir al consumidor. La originalidad puede llegar a partir de la alegoría.
3.- Evitar la complejidad
Leo Brunett sostenía que la receta de la publicidad exitosa consiste en ser simple, trascendental, atractiva y divertida, y es que muchas agencias con tal de parecer innovadoras y arriesgadas recurren la complejidad, lo que da como resultado caer en lo absurdo, confundiendo al consumidor y sin aportar nada a la marca.
4.- Impactar de forma atemporal
Este punto va ligado con el anterior, la publicidad debe ser memorable, tanto que logre trascender por varios años, por ello es muy importante no abusar constantemente de modas pasajeras que al paso de unos días ya no generan impacto, ni de personajes con fama efímera que dejarán de ser recordables en el corto plazo. La publicidad atemporal puede ser aquella que se explica por sí misma sin necesidad de ahondar en su contexto.