Las empresas requieren gestionar de manera eficiente sus trabajos en campo, como parte de los procesos core de su negocio, y una manera de hacerlo son las herramientas digitales.
Dicha labor implica la administración de las unidades de trabajo, sus actividades y los tiempos de ejecución de las tareas, las rutas de desplazamiento de los funcionarios encargados de ejecutar las órdenes de trabajo, el control del inventario de los equipos y materiales, y la relación con contratistas externos.
En esta línea, el 46 por ciento de las empresas en México invierten en nuevas tecnologías para la función operativa y el 30 por ciento establece un área interna dedicada a la innovación tecnológica.
Las áreas de logística, operaciones o finanzas, así como Recursos Humanos –que se verían enormemente impulsada por la digitalización- son las últimas en ser contempladas para estos proyectos.
Gestionar eficientemente las variables anteriormente mencionadas, implica un reto para las empresas de utilities y de telecomunicaciones, que demanda la inclusión de una solución tecnológica especializada en Field Service, que automatice labores manuales y procesos repetitivos, y que además facilite la comunicación y consulta de información en línea.
Frente a este desafío muchas compañías han empezado a implementar herramientas digitales para dinamizar y potenciar sus procesos. La gestión eficiente de estos elementos determina la valoración que hace el usuario de su experiencia con el proveedor de servicio:
Administración efectiva de unidades de trabajo, tiempos y materiales: empresas deben tener una visión integral de los recursos, fuerza de trabajo propia y externa del proveedor de servicios y del ciclo completo de las órdenes de trabajo, el cual comprende la generación, asignación, ejecución, cierre y seguimiento de las actividades en campo.
Ejecución en campo con dispositivos móviles: gestionar en línea las órdenes de trabajo generadas en la operación diaria, registrar los materiales y equipos empleados en la ejecución de las actividades, mantener una comunicación constante con los funcionarios y controlar su ubicación y tiempos de desplazamiento.
Responder ágilmente ante imprevistos: Las empresas mantener una visión unificada y en tiempo real de la operación en campo, usando herramientas como reportes y tableros de control; de igual forma posibilita consultar información georeferenciada de las unidades y de las órdenes de trabajo, la cual puede ser usada para la asignación de órdenes de apoyo (en caso de requerirlo), y la toma de decisiones de negocio.
Gestionar la relación con contratistas externos: hace posible establecer los términos y condiciones de los contratos, liquidar de manera flexible las obligaciones por los trabajos ejecutados y llevar seguimiento de las actividades realizadas por la fuerza de trabajo externa.